El expresidente Rafael Correa fue sentenciado, junto con otras 19 personas, por el delito de cohecho, en el denominado caso Sobornos 2012-2016. La justicia investigó el funcionamiento de un esquema de corrupción que se manejó desde el Palacio de Carondelet en el que una veintena de empresarios recibieron contratos con el Estado a cambio de aportar económicamente para Alianza PAIS.
El fallo de la Corte Nacional de Justicia, que se conoció el pasado 7 de septiembre, condena al expresidente a pagar ocho años de prisión. Pero, hay otras implicaciones.
Por ejemplo, el exmandatario ya no podrá ser candidato a la vicepresidencia para 2021, como había anunciado y tampoco seguirá cobrando su pensión vitalicia.