Lunes, 18 de marzo de 2024

Acuerdo comercial con Estados Unidos se enfría, aunque las relaciones mejoran

Autor:

Gabriela Coba

Actualizada:

22 Oct 2021 - 0:04

Con un acuerdo comercial las exportaciones ecuatorianas a Estados Unidos podrían crecer cerca de 40%.

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el presidente Guillermo Lasso, en el Palacio de Carondelet, el 19 de octubre de 2021.

Autor: Gabriela Coba

Actualizada:

22 Oct 2021 - 0:04

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el presidente Guillermo Lasso, en el Palacio de Carondelet, el 19 de octubre de 2021. - Foto: Presidencia/Flickr

Con un acuerdo comercial las exportaciones ecuatorianas a Estados Unidos podrían crecer cerca de 40%.

La visita a Ecuador del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha sido catalogada como una muestra de "la relación fructífera y productiva" entre los dos países, según el Gobierno del presidente Guillermo Lasso.

Así lo considera también el sector privado, que reconoce que la buena relación entre las dos naciones no significa que pronto vaya a concretarse un acuerdo comercial, que había generado expectativas en Ecuador, tras la firma del tratado de primera fase, a finales de 2020.

"No hay algo inmediato, pero todo ayuda en el objetivo de ponernos en la agenda de Estados Unidos y lograr firmar un acuerdo comercial", dice Felipe Rivadeneira, presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor).

Durante su primera visita oficial a Sudamérica, que inició en Quito, Blinken evitó hablar sobre un tratado comercial con Ecuador. En su lugar abordó asuntos como seguridad, combate al narcotráfico, migración y medioambiente.

Este enfoque hacia otros temas obedece a que la política comercial de la administración de Joe Biden, quien asumió hace menos de un año, todavía no está clara, dice Iván Ortiz, director del Centro de Negocios de la Cámara de Comercio Ecuatoriano Americana (Amcham).

"La nueva administración de Estados ha sido muy clara en que hay un proceso para analizar a detalle cuál va a ser el enfoque de su política comercial".

Iván Ortiz, Amcham

Agrega que eso se evidencia en el caso de Kenia, mercado con el que Estados Unidos tenía avances comerciales importantes, que tras el cambio de gobierno no se han retomado.

Temas pendientes

Para Ortiz, que Blinken no haya tratado la suscripción de un tratado también responde a que existen otros temas comerciales que los dos países tienen pendientes:

  • Implementación del acuerdo de primera fase.
  • Suscripción de un acuerdo de cielos abiertos, del cual se ha hablado desde 2017.

El acuerdo de primera fase, que es visto como antesala a un tratado más amplio, contempla cuatro temas: facilitación de comercio, buenas prácticas regulatorias, beneficios para pequeñas y medianas empresas (pymes) y lucha anticorrupción.

Tras la firma del acuerdo, los temas que debían implementarse inmediatamente eran los beneficios para las pymes y la lucha contra la corrupción. En cambio, la facilitación del comercio y las buenas prácticas regulatorias se deben aplicar hasta 2022.

Sobre el acuerdo de cielos abiertos, el presidente Lasso aseguró, en julio, que envió una carta a su homólogo estadounidense, Joe Biden, para pedirle acelerar el proceso para la firma de este documento.

Los acuerdos de cielos abiertos se firman entre dos o más países para agilizar y dinamizar el negocio aeronáutico. Con esos acuerdos se busca generar una mayor competencia en tarifas, lo que equivale a una disminución el precio de los pasajes, dependiendo de la oferta y de la demanda. Y eso se traduce en más rutas, turismo y negocios.

Expectativa por el TIC

Si bien los dos países tienen temas comerciales aún pendientes, eso no significa que las expectativas sobre la firma de un acuerdo se hayan desvanecido.

"Hay expectativas porque a finales de 2021 debe desarrollarse una reunión del Consejo de Comercio e Inversión (TIC), porque así lo establece el acuerdo de primera fase", afirma Ortiz.

El TIC es una reunión de los sectores oficiales de los dos países en la que se analizan cómo están las relaciones binacionales en distintos temas. Se trata de un paso previo en el que se establecen metas para mejorar las relaciones comerciales y así preparar a los países para un tratado de libre comercio.

Menos competitividad y desarrollo

Para Ecuador un acuerdo con Estados Unidos es fundamental, porque se trata de su principal socio comercial. Entre enero y agosto de 2021 las exportaciones ecuatorianas a ese país sumaron USD 4.168 millones, lo que significa el 25% de la canasta exportable, según el Banco Central

Eso, a pesar de que la ausencia de un tratado entre los dos países le ha salido cara a Ecuador, que ha perdido competitividad frente a Perú y Colombia, que tienen tratados de libre comercio (TLC) con Estados Unidos desde 2009 y 2011, respectivamente.

En cambio el 20% de las exportaciones ecuatorianas a Estados Unidos tienen aranceles. Eso incluye a las partidas que están pagando aranceles porque el Sistema Generalizado de Preferencias (SGP) no ha sido renovado, tras la finalización de su vigencia en diciembre de 2020.

Los aranceles que pagan los productos ecuatorianos que son exportados a Estados Unidos oscilan entre 3% y 30%.

No tener un acuerdo comercial con Estados Unidos "le sale más caro a las exportaciones tradicionales, que enfrentan más dificultades, porque la competencia es mayor", sostiene Ortiz.

En un escenario en el cual el país no logre un acuerdo con Estados Unidos, las exportaciones ecuatorianas dependerán de su diferenciación, dice Ortiz.

Para Rivadeneira, la falta de un acuerdo con Estados Unidos ha hecho que Ecuador pierda oportunidades de crear nuevos sectores de exportación, que sí ocurrió con la Ley de Promoción del Comercio Andino y Erradicación de las Drogas (Atpdea), vigente entre 1991 y 2013.

"Con la Atpdea, que se creó con la intención de que las personas de las zonas rurales de la región Andina no caigan en las drogas, se desarrollaron sectores de exportación", afirma concluye Rivadeneira.

Dos sectores exportadores que se crearon en ese entonces, y que representan más de USD 1.000 millones para la economía y más de 40.000 empleos, son el florícola y el de hortalizas congeladas.