Jueves, 25 de abril de 2024

"Para comer pan rico tiene que venir a Quito", dice Danielle Elie

Autor:

Gabriela Coba

Actualizada:

5 Oct 2019 - 0:05

Cyrano

Autor: Gabriela Coba

Actualizada:

5 Oct 2019 - 0:05

Cyrano cumplió 60 años desde que abrió su primer local en Quito. - Foto: Cyrano, Facebook

Son seis décadas en las que Cyrano y tres en las que Corfú han endulzado la gastronomía quiteña. En entrevista con PRIMICIAS Danielle Elie, gerente de la empresa, narra la historia de estas dos firmas, su ascenso como mujer empresaria y su visión futura del negocio.

Cyrano y Corfú son dos negocios que, con sus panes y helados, forman parte de la historia de los quiteños. “Por lo pronto el que quiere comer pan rico tiene que venir a Quito”, dice Elie al ser consultada si planea ampliar el negocio a otras ciudades.

Ambas empresas empezaron como pequeños emprendimientos hace 60 y 30 años, respectivamente. Cyrano fue fundada por el padre de Danielle Elie, René.

Mientras que Corfú fue un emprendimiento de Danielle y su hermano Christian Elie.

En 2002 Christian fallece de manera prematura a los 39 años de edad y Danielle se hace cargo de la administración de Corfú.

Tan solo un año después, muere el padre de los Elie y Danielle debe asumir también la administración de Cyrano.

"No fue tarea fácil en una sociedad que dudaba de la capacidad empresarial de las mujeres", dice.

Bajo su comando, Cyrano y Corfú han crecido y tienen actualmente 16 locales en la capital y sus valles aleñados. El portafolio de productos tiene más de 500 opciones.

Cyrano emplea actualmente 420 colaboradores, de los cuales 60% son mujeres.

"Tengo un gran compromiso con las mujeres. Para ellas es más complejo abrirse camino en el ámbito laboral", dice Danielle.

La empresa, que empezó siendo un negocio familiar continuará así.

"Tenemos personas que son parte de la familia de mi esposo que se encuentran involucradas en la operación", dice Danielle Elie.

Panadería quiteña con raíces francesas

Cyrano nació en 1958 de la mano René Elie, un joven francés que llegó a Ecuador huyendo de las guerras europeas.

Elie trajo consigo la herencia de seis generacionesde panaderos, que plasmó en una panadería que nació en la avenida 6 de Diciembre, en Quito.

Con el paso de los años Elie cerraría la panadería y la volvería a abrir en un local en la avenida Portugal y De los Shyris, en el norte de Quito.

Años después, en 1988, sus hijos Danielle y Christian seguirían sus pasos y fundarían en el mismo lugar la heladería llamada Corfú.

La historia de estos dos negocios y de quienes hacen parte de ellos se encuentra en el libro Amasar, que fue lanzado recientemente y que está en venta en los locales de Cyrano.