Martes, 19 de marzo de 2024

Hay dos alternativas cuando usted no puede pagar sus créditos

Autor:

Evelyn Tapia

Actualizada:

1 Jul 2022 - 0:03

Hasta diciembre de 2022, las entidades financieras calificarán una deuda como vencida solo después de 61 días de estar impaga. La Junta de Política y Regulación Financiera amplió ese plazo este 29 de junio de 2022.

Clientes en los exteriores del Banco del Austro.

Autor: Evelyn Tapia

Actualizada:

1 Jul 2022 - 0:03

Imagen referencial. Clientes en los exteriores del Banco del Austro. - Foto: Evelyn Tapia/Primicias

Hasta diciembre de 2022, las entidades financieras calificarán una deuda como vencida solo después de 61 días de estar impaga. La Junta de Política y Regulación Financiera amplió ese plazo este 29 de junio de 2022.

Las cuotas de los créditos que no se hayan pagado en el plazo previsto tendrán una ventana más larga de tiempo antes de que el banco califique la deuda como vencida.

La Junta de Política y Regulación Financiera dispuso que, hasta el 31 de diciembre de 2022, las entidades públicas y privadas califiquen como vencidas las deudas que estén impagas por más de 61 días.

Hasta febrero de 2020, las deudas entraban en esa categoría después del día 15 o 30, de acuerdo con el tipo de crédito.

Pero, por la ruptura en la cadena de pagos causada por la pandemia de Covid-19, en marzo de 2020, la Junta decidió ampliar el plazo para registrar una deuda como vencida después de los 61 días.

En ese momento, la Junta había dispuesto que este cambio dure hasta julio de 2020, pero el plazo se ha ido extendiendo dos años más.

David Castellanos, analista financiero, explica que la medida ha ayudado a que el puntaje de los clientes en el buró de crédito no baje.

Añade que, además, se ha controlado el crecimiento de la cartera vencida y, por ende, los bancos no han tenido que hacer provisiones tan grandes para cubrirse frente al retraso en los pagos.

Dos alternativas

Aunque la Junta ha tomado estas medidas para ayudar a los clientes que no pueden pagar a tiempo sus deudas, todavía existen clientes con problemas de pago, según la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (Asobanca).

Por eso, para esos casos, los bancos ofrecen las alternativas de reestructuración y refinanciamiento.

  • Refinanciamiento: Se aplica a los clientes que tienen dificultades para pagar sus cuotas, o el ente identifica la probabilidad de incumplimiento, aunque el cliente aún tiene ingresos. Se da una modificación de algunas de las condiciones, por ejemplo, la reducción de la cuota y la ampliación del plazo.
  • Reestructuración: Aplica a deudas que se han calificado como vencidas. Se da en casos en los que el deudor tiene una capacidad de pago muy afectada, lo que implica una nueva operación crediticia. Es decir, se cierra el crédito anterior y se crea un nuevo crédito en el que el capital está compuesto por el capital de la deuda anterior, los intereses y la mora acumulada.

Crédito productivo y consumo

La cartera refinanciada y reestructurada representó el 4,1% del total de créditos, a mayo de 2022, y sumó USD 1.444 millones. Esto es USD 566,9 millones más que en mayo de 2019.

Antes de la pandemia, en mayo de 2019, esta cartera de clientes con dificultades de pago representaba el 3,1% de la cartera total de créditos de la banca.

El segmento que tiene más créditos refinanciados y reestructurados es el crédito productivo: USD 588 millones, en mayo de 2022.

Le sigue la cartera de consumo, con USD 552 millones.

Banca pública

En la banca pública, las operaciones refinanciadas y reestructuradas representaban el 12,37% de la cartera total, en mayo de 2022.

En mayo de 2019, antes de la pandemia, este tipo de cartera representaba el 8,03% del total de créditos.

Castellanos explica que, si bien este tipo de cartera en la banca pública es mayor que la del sector privado, estas cifras podrían ser aún más altas porque el índice de morosidad en este sector es superior.

En la banca pública, la morosidad a mayo de 2022 fue de 17% y en la banca privada, de 2,2%.

Según Castellanos, en banca pública los procesos para castigar cartera vencida son más largos y burocráticos.

"Además, las entidades no cuentan con provisiones suficientes para cubrir la cartera vencida en la misma medida que lo hace la banca privada", añade.

El número de refinanciamientos y reestructuraciones es bajo, además, porque las políticas públicas de los gobiernos han optado por priorizar las moratorias o condonaciones de deudas a los clientes de la banca pública.

En el contexto del paro nacional, el 17 de junio de 2022, el gobierno ofreció condonar deudas a 27.000 clientes de BanEcuador.