Miércoles, 01 de mayo de 2024

"Latinoamérica podría captar algo de la inversión que dejará de ir a China"

Autor:

Gabriela Coba

Actualizada:

3 May 2020 - 0:05

ingesa

Autor: Gabriela Coba

Actualizada:

3 May 2020 - 0:05

La empresa textil Ingesa elabora mascarillas por la emergencia sanitaria, el 16 de abril. Analiza la posibilidad de iniciar exportaciones a Estados Unidos. - Foto: Ministerio de Producción/Twitter

La crisis económica ocasionada por la pandemia de Covid-19 ha hecho que los inversores multinacionales comprendan que necesitan diversificar sus proveedores, para depender menos de países como China.

La crisis que vive el mundo, por la pandemia de coronavirus, significa oportunidades para Latinoamérica, por lo que la región debería replantear su modelo económico.

"Es probable que Latinoamérica recuerde que la dependencia excesiva de los productos básicos, así como la falta de integración regional y la sobreabundancia de mano de obra en el sector informal, son tres riesgos negativos muy altos que deben abordarse", dice en entrevista con PRIMICIAS, Eric Farnsworth, vicepresidente del think tank estadounidense Consejo de las Américas.

Farnsworth, quien también trabajó en el Departamento de Estado de Estados Unidos, explica las oportunidades que trae la crisis para la región y Ecuador.

Eric Farnsworth, vicepresidente del think tank estadounidense Consejo de las Américas.

Eric Farnsworth, vicepresidente del think tank estadounidense Consejo de las Américas. Cortesía

Después de la pandemia, ¿qué va a pasar con la economía mundial?

La economía mundial esta en problemas, por lo menos en el corto plazo, y quizá también en el largo plazo. La única pregunta real sobre el crecimiento global este año es ¿qué tan bajo será?

En el primer trimestre de 2020 la economía de China fue negativa, algo que no se había visto en los últimos 30 años. Estados Unidos está claramente en recesión, al igual que la Eurozona. Los mercados emergentes también han sido golpeados.

Pero, ¿habrá recuperación?

Habrá una recuperación económica, pero mientras más tiempo tome restablecer la confianza del público en las actividades sociales y en los mercados, en otras palabras, más se demore en encontrar una vacuna o al menos una estrategia efectiva para mitigar los efectos del coronavirus, más lenta y más difícil será.

¿Cuánto podría tardar la reactivación?

La mayoría de los analistas en este punto asumen que la recuperación no será tan rápida como el reciente colapso económico. No obstante, existe una esperanza real de que, a medida que las economías se reabran, una recuperación sostenida comenzará durante el tercer trimestre de este año y continuará hasta 2021.

Cada región tiene una realidad distinta. ¿Qué pasará con Latinoamérica?

El crecimiento de Latinoamérica para 2020 ya se proyectaba apenas positivo. Ahora el Banco Mundial cree que las tres economías más grandes de la región, Brasil, México y Argentina, se contraerán entre 5% y 6% cada una. Esto es notable, especialmente después de varios años de lento crecimiento.

"Las dos calamidades del virus, la pandemia y la caída de los precios del petróleo, son un golpe fuerte para la región".

Eric Farnsworth, vicepresidente Consejo de las Américas.

Si a este escenario se suma la desaceleración en los mercados de productos básicos en general, así como la continua y creciente crisis humanitaria causada por el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela, América del Sur tendrá problemas este año y posiblemente también el próximo. Se proyecta que Ecuador tendrá un crecimiento económico negativo en 2020 de más del 6%.

La crisis también significa oportunidades y reinvención. ¿Qué cambios experimentarán las economías de la región?

Afortunadamente, muchos países latinoamericanos ya habían tomado medidas importantes a lo largo de los años para desarrollar la capacidad de recuperación económica en previsión de una recesión inevitable. Ahora, en medio de la crisis, los bancos centrales y los gobiernos generalmente han tomado las medidas apropiadas, con el apoyo de las instituciones financieras internacionales.

Pero, nadie podría haber predicho la gravedad de la recesión económica, que fue causada por la interrupción completa de gran parte de la actividad económica. Además, la crisis se ha amplificado porque está sincronizada en prácticamente todas las naciones.

A diferencia de la crisis de 2008-2009, no existe un motor de crecimiento global para disminuir la gravedad. Como resultado, es probable que Latinoamérica recuerde que la dependencia excesiva de los productos básicos, así como la falta de integración regional y la sobreabundancia de mano de obra en el sector informal son tres riesgos muy fuertes que deben abordarse de manera significativa.

¿Qué oportunidades tiene Latinoamérica? ¿Qué países de la región están más preparados y por qué?

A decir verdad, nadie estaba preparado para la crisis actual. Ni China, donde comenzó el virus, ni Estados Unidos, ni Europa, ni Latinoamérica. Ahora se deberá prestar mucha atención a las mejoras en la salud pública, y el sector privado debe ser un socio de pleno derecho.

Medicamentos, equipos, tecnología, capital humano: todos son críticos para satisfacer las crecientes necesidades de atención médica de Latinoamérica. Habrá oportunidades significativas en este sector como resultado.

¿Puntualmente qué oportunidades económicas tendrá la región? Usted ha dicho que Estados Unidos migrará de China a Latinoamérica.

Los inversores multinacionales ahora entienden mejor que nunca que no pueden confiar en que China sea el único anfitrión de las actividades de la cadena de suministro. Sí, el costo de la mano de obra es menor -aunque está aumentando- pero los riesgos de depender excesivamente de una economía cerrada, autoritaria y poco transparente son demasiado grandes.

"La resistencia de la cadena de suministro será el nuevo mantra, y eso requiere diversificación".

Eric Farnsworth, vicepresidente Consejo de las Américas.

Latinoamérica tiene numerosas ventajas para captar la inversión que migra desde China: proximidad geográfica al mercado más grande del mundo (Estados Unidos), zonas horarias comunes, idioma, comprensión cultural, prácticas de negocios, incluso moneda común en algunas economías como Ecuador, El Salvador y Panamá.

Las economías latinoamericanas que mantienen prácticas comerciales sólidas, fuerzas laborales educadas y baja criminalidad, entre otras ventajas, pueden cosechar una ganancia inesperada de la inversión estadounidense que busca diversificarse lejos de China.

¿Cuáles serán los desafíos para que la región sea un buen socio para Estados Unidos?

El mundo es un lugar competitivo y el capital es un cobarde. Las naciones que mejoren intencionalmente sus climas comerciales nacionales, mantengan las mejores prácticas internacionales, fortalezcan el estado de derecho, incluida la lucha contra la corrupción, y reduzcan las barreras al comercio, se beneficiarán.

¿Cómo ve a Ecuador?

Ecuador tiene muchas ventajas naturales, aunque también enfrenta varias dificultades, incluido un impacto significativo de la pandemia y también la carga de numerosos refugiados venezolanos que huyen del régimen de Maduro. Además, el gobierno anterior abandonó al país con una pesada carga de deuda y una relación desequilibrada con China. Estos problemas son desafíos importantes, sin duda.

"La buena noticia es que el pueblo ecuatoriano es resistente, y con la asistencia internacional de las instituciones financieras internacionales, así como la asistencia bilateral de los Estados Unidos y otros, Ecuador debe estar en el camino de la recuperación a mediano plazo".

Eric Farnsworth, vicepresidente Consejo de las Américas.

En febrero, el presidente Lenín Moreno se reunió con Donald Trump para discutir el inicio de un acuerdo comercial ¿Es esto factible después de la pandemia?

Todo es posible, pero no anticiparía ningún movimiento hacia un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos este año. Mientras tanto, la búsqueda continua de la membresía en la Alianza del Pacífico y, en última instancia, en el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), sería muy ventajosa y apropiada.