Viernes, 03 de mayo de 2024

Regresan las balaceras y el encierro a Socio Vivienda 2

Autor:

Redacción Primicias

Actualizada:

8 Ene 2023 - 5:21

Roger Llerena, alias 'morsa' y cabecilla de la banda criminal Los Lobos, era el promotor de las balaceras en Socio Vivienda 2 en Guayaquil. Tras su asesinato, la estructura delictiva ya tiene su reemplazo.

El barrio Socio Vivienda 2 vive asediado por las bandas delincuenciales. Guayaquil, 31 de mayo de 2022.

Autor: Redacción Primicias

Actualizada:

8 Ene 2023 - 5:21

El barrio Socio Vivienda 2 vive asediado por las bandas delincuenciales. - Foto: Redacción Primicias

Roger Llerena, alias 'morsa' y cabecilla de la banda criminal Los Lobos, era el promotor de las balaceras en Socio Vivienda 2 en Guayaquil. Tras su asesinato, la estructura delictiva ya tiene su reemplazo.

Con la salida de los militares de Socio Vivienda 2, los habitantes han regresado a la rutina de siempre: el encierro y la zozobra. Y ahora reconocen que el control criminal en la zona ya tiene reemplazo.

Los moradores indican que había una relativa calma durante el último estado de excepción, en 2022, porque se intensificaron los controles policiales y militares.

Pero critican que no se ejecutaron cambios estructurales para prevenir los delitos en el sector.

“Los asaltos regresaron, los extorsionadores siguen cobrando a los negocios y las balaceras continúan, todo sigue igual”.

Sonia, habitante de Socio Vivienda 2.

El complejo habitacional Socio Vivienda 2 es parte del distrito Nueva Prosperina, en el noroeste de Guayaquil.

Hasta los primeros días de diciembre de 2022, en este sector se reportaron 305 muertes violentas. “Es el distrito que ha tenido mayor incidencia de homicidios en la ciudad”, informaron las autoridades policiales.  

La Policía señala que la principal motivación de la violencia es el narcotráfico y el control del territorio para la venta de la droga. En la zona hay dos grupos enfrentados: Los Lobos y Los Choneros.

Alias 'morsa' ya tiene reemplazo 

Roger Joao Llerena o alias 'morsa', cabecilla del grupo criminal Los Lobos, fue asesinado el pasado 30 de septiembre.

Con solo 26 años tenía un historial judicial que data desde 2014 por tráfico de drogas, porte y tenencia de armas, robo e intimidación. Pese a ello, entraba y salía de la cárcel. 

La última aprehensión fue en mayo de 2022, cuando lo detuvieron con un arma de fuego y quedó en libertad.

Alias ‘morsa’ es señalado como el promotor del caos en Socio Vivienda 2, pero tras su muerte, las balaceras no se detienen.

Esto se debe a que la banda delictiva ya ascendió a otro cabecilla: el hermano de alias ‘morsa’.

Carta sin respuesta

El 15 de noviembre de 2022, un grupo de moradores de Socio Vivienda 2 escribió una carta dirigida al jefe del distrito Nueva Prosperina, en la que le piden que les deje “instalar nuevamente las rejas para la seguridad y bienestar de todos”.

Recuerdan que en septiembre, policías y funcionarios del Municipio de Guayaquil llegaron de un momento a otro a retirarlos.

Según dijeron los uniformados, los portones eran obstáculos al momento de una persecución contra los delincuentes.

Los moradores se acercaron a la Unidad de Policía Comunitaria (UPC), que está rodeada con mallas, sacos de arena y candados, en un intento por blindarse de las balaceras. 

Mientras la Policía protege sus instalaciones, retiró la única barrera que les daba una mínima seguridad a los habitantes: los portones en las peatonales.

Con estas estructuras, los moradores impedían que los delincuentes transiten libremente con las armas y que las balaceras ocurran en las puertas de sus casas.

“Cuando llegamos, la UPC estaba cerrada y los policías nos atendieron desde la terraza. Ahora pasan ahí”, relata Merlyn, una de las moradoras que firmó la carta.  

"Era algo ridículo, nosotras gritábamos desde abajo y ellos respondían desde el techo que no podían bajar y nunca nos recibieron la carta", asegura la mujer.

"La Policía dijo que hagamos lo que queramos, porque ellos no nos podían dar seguridad".

Merlyn, moradora de Socio Vivienda 2.

Tras lo ocurrido con los policías, los moradores expresan que reunirán el dinero para instalar los portones y volver a encerrarse.