Al menos cinco sismos de leve magnitud se sintieron en Manabí la noche del jueves, pero el Instituto Geofísico descarta que se trate de un enjambre sísmico.
En la noche del 24 de agosto, al menos cinco sismos de magnitudes leves y moderadas se sintieron en Manabí. El último de ellos fue a las 21:38 y tuvo como epicentro a Bahía de Caráquez.
Ante la ocurrencia de estos temblores, usuarios en redes sociales se han preguntado si la provincia afronta un enjambre sísmico, como el reportado por el Instituto Geofísico (IG) en agosto de 2022, frente a las costas de Jama.
El sismólogo del IG, Daniel Pacheco, aclara a PRIMICIAS que no es posible afirmar aún que los eventos telúricos sentidos en Manabí son producto de un enjambre sísmico.
"Han sido eventos muy pequeños y no se puede decir que son a causa de un enjambre sísmico", dijo Pacheco.
Pero, ¿qué exactamente es un enjambre sísmico? Según el IG, este fenómeno se conoce como la ocurrencia de varios sismos seguidos luego de un primer temblor, y presentan magnitudes moderadas a pequeñas.
Para que se confirme un enjambre sísmico, explica Pacheco, deben ocurrir de cinco a seis sismos por al menos tres días.
"Lo que ha ocurrido en Manabí no está aún fuera de lo normal, pero seguimos monitoreando la zona", añadió el experto del IG
¿Por qué se desencadena un enjambre? El fenómeno se debe a la variación de las propiedades en la zona de la falla tectónica, que facilitan el deslizamiento de las placas, oceánicas y superior.
Como ha explicado el IG antes, frente a las costas de Ecuador está la placa de origen oceánico de Nazca, que se introduce o subduce por debajo de la placa Sudamericana. Es decir, es una zona de alta actividad sísmica.
Además, las costas de Manabí son una zona habitual de enjambres sísmicos.
"En el pasado se han detectado enjambres con diferentes duraciones, diferente número de sismos y diferentes rangos de magnitudes", dice otro reporte del IG.
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