Domingo, 28 de abril de 2024

La Inteligencia Artificial acapara la atención en el Mobile World Congress 2024

Autor:

Gabriela Coba

Actualizada:

26 Feb 2024 - 19:39

PRIMICIAS le cuenta todas las novedades de Mobile World Congress 2024, el congreso más importante de tecnología del mundo, que este año recibe a cerca de 95.000 personas.

Uno de los ocho salones del Mobile World Congress, en Barcelona, el 26 de febrero de 2024.

Autor: Gabriela Coba

Actualizada:

26 Feb 2024 - 19:39

Uno de los ocho salones del Mobile World Congress, en Barcelona, el 26 de febrero de 2024. - Foto: PRIMICIAS

PRIMICIAS le cuenta todas las novedades de Mobile World Congress 2024, el congreso más importante de tecnología del mundo, que este año recibe a cerca de 95.000 personas.

Barcelona (España). El Mobile World Congress 2024 abrió sus puertas este 26 de febrero. El desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA) se convirtió en el gran protagonista de esta edición.

El evento, que antes se centraba en las nuevas generaciones de celulares, ahora también aborda la IA, las oportunidades que genera la evolución de la red 5G, la robótica y la programación.

En la edición de este año, la Inteligencia Artificial ha marcado gran parte de la innovación de las compañías que se encuentran en el congreso, entre ellas Huawei, Google, Samsung, Meta y Microsoft.

Por eso, entre las curiosidades de las empresas que usan IA figuran desde podcast, pasando por traducción de llamadas en simultáneo hasta llegar al humanoide Ameca.

La relevancia de la IA en el área de la tecnología llevó a que cerca de 20 charlas y mesas redondas del congreso giren en torno al tema en el primer día.

Además, personajes del área de Inteligencia Artificial, como Demis Hassabis, cofundador y consejero delegado de Google DeepMind; y Brad Smith, presidente de Microsoft, uno de los grandes accionistas de OpenAI (ChatGTP), han estado presentes en el Mobile World Congress 2024.

Funciones de la Inteligencia Artificial

El desarrollo acelerado de la Inteligencia Artificial ha derivado en una serie de funciones y dispositivos tecnológicos, como los humanoides, que son robots con características humanas.

Ese es el caso de Ameca, de la compañía inglesa Enginereed Arts. El robot que puede moverse, hablar y expresar una variedad de emociones que van desde la felicidad hasta la ira.

¿Cómo lo hace? A través del modelo de lenguaje GPT-4, el más avanzado -hasta el momento- de OpenAi, la compañía de ChatGPT.

"Estoy en Barcelona. ¿Están disfrutando de su estadía en la ciudad".

Ameca, responde al ser consultada sobre su ubicación

Entre las novedades en el mercado que giran en torno a IA también destacan celulares inteligentes como los Galaxy S24, lanzados por Samsung a inicios del año.

Esos equipos dependen de la Inteligencia Artificial, que ofrece funciones como traducción simultánea de llamadas, asistencia en la redacción de mensajes de texto y hasta encontrar cosas o lugares a través de imágenes.

Y las funciones de la IA no se encuentran solo en dispositivos o aplicaciones que llegan al consumidor final.

Proveedores de servicios de tecnología y operadoras están trabajando en la optimización del tráfico de sus redes y de sus recursos para abordar el aumento de la demanda de conectividad debido al mayor uso de la Inteligencia Artificial. Ese es el caso de Huawei, que anunció el lanzamiento comercialmente su red móvil 5,5G a partir de 2024.

Se espera que esa generación de tecnologías de telefonía móvil llegue a Latinoamérica entre 2028 y 2030.

La punta del iceberg

Si bien las nuevas funciones y el acelerado desarrollo de la IA han sorprendido a más de uno en el Mobile World Congress, se trata solo de la punta del iceberg.

"Solo estamos rozando la superficie de lo que va a venir en los próximos años", sostuvo Hassabis.

Y al igual que otros expertos, advierte sobre los peligros de la IA a futuro. "Hoy no es un problema, porque los actuales sistemas están relativamente en sus primeras etapas", asegura.

Sin embargo, en los próximos años, la IA tendrá la capacidad de planificar y actuar, dice Hassabis. Se trata de una realidad que preocupa, ya que la tecnología puede llegar a manos con malas intenciones que puedan sacar provecho a su favor, ya sea personas o Estados.