Jueves, 25 de abril de 2024

El CNE analiza cómo será la votación en las presidenciales de 2021

Autor:

Estefanía Celi

Actualizada:

5 May 2020 - 0:04

Autor: Estefanía Celi

Actualizada:

5 May 2020 - 0:04

El Pleno del CNE, en sesión del 12 de marzo de 2020. - Foto: CNE

A nueve meses de las elecciones, el Consejo Nacional Electoral busca formas de avanzar en la organización del proceso electoral en medio de la emergencia sanitaria. La fecha de la primera vuelta electoral se mantiene para el 7 de febrero de 2021.

La emergencia sanitaria por el coronavirus en Ecuador coincidió con el proceso de organización de las elecciones presidenciales y legislativas de 2021. En medio de la epidemia, el Consejo Nacional Electoral (CNE) analiza las posibilidades para llevar a cabo los comicios en medio del distanciamiento social.

Hasta cuándo deberán mantenerse las medidas de protección frente al coronavirus es todavía una interrogante. Es por eso que el escenario que se maneja en el CNE es que, para el 7 de febrero de 2021, fecha de la primera vuelta electoral, todavía habrá que mantener precauciones frente al virus.

Entre los cinco consejeros del CNE, hay división en cómo deberían ser las votaciones en 2021. Por un lado, la presidenta, Diana Atamaint, y el consejero José Cabrera plantean la posibilidad de "segmentar" la votación en varios días. Por el otro, los vocales de minoría, Enrique Pita y Luis Verdesoto, proponen que el voto sea "telemático" y presencial.

Ambas propuestas serán discutidas y analizadas durante la semana en el Pleno del organismo. El tiempo es el principal factor en contra, pues quedan poco más de nueve meses para el 7 de febrero de 2021, fijado para la primera vuelta electoral.

El tiempo para la fijación del sistema de votación es incluso menor, pues para noviembre ya debería estar listo para comenzar con los simulacros del día de las elecciones.

El problema es, sin embargo, la legalidad y constitucionalidad que un cambio en la forma de votación puede tener. La Constitución y el Código de la Democracia establecen principios y normas para el proceso electoral que no contemplan problemas como los de la pandemia actual.

Votación segmentada en tres días

La presidenta del CNE, Diana Atamaint, y el consejero José Cabrera, impulsan la posibilidad de que en 2021 las votaciones se hagan en tres días para evitar aglomeraciones en los recintos.

Atamaint señaló que la población debería ser segmentada en varios grupos, que voten en distintas juntas receptoras del voto con miembros distintos para cada día. La idea es que los recintos electorales no se llenen de personas para evitar el riesgo de contagio de coronavirus.

Esta opción, según Cabrera, respeta los principios constitucionales de que el voto es universal, igual, directo, secreto y escrutado públicamente.

Pero plantea otros problemas, como qué hacer con las urnas de los votos en los primeros dos días. Esto implicaría embodegamiento y seguridad, que según Pita significaría un incremento de gastos en los previstos hasta ahora.

Frente a esto, la credibilidad de la ciudadanía en el CNE también es un problema.

Lo que sí debería considerarse, según Atamaint, en este caso es incluir guantes, gel antibacterial y mascarillas en cada paquete electoral. Este material debería entregarse incluso para el personal de Policía y Fuerzas Armadas, y considerar incluso para los votantes.

Voto híbrido: telemático y presencial

El vicepresidente del CNE, Enrique Pita, y el consejero Luis Verdesoto proponen que en 2021 haya un sistema de votación mixto, que combine el voto telemático y el presencial.

Verdesoto explicó que la idea es que quienes quieran votar telemáticamente se inscriban para hacerlo y sean eliminados del padrón presencial. Con esta opción, las personas podrían sufragar a través de computadoras o tablets por internet.

Con esta opción, explicó, se pueden evitar aglomeraciones sobre todo en las provincias más grandes, que también son las más afectadas por el coronavirus: Guayas, Manabí y Pichincha.

Pita explicó que al finalizar la votación, se haría un escrutinio público en la junta provincial, para cumplir con los preceptos constitucionales de publicidad. La autenticación de los ciudadanos sería con un sistema similar al que usan los bancos.

Esta opción, sin embargo, también tiene problemas. En primer lugar está el costo, que los consejeros de minoría calculan en unos USD 77 millones. Sin embargo, los problemas con Finanzas para la aprobación del presupuesto electoral ya vienen desde antes de la epidemia.

En segundo lugar está la falta de confianza de la ciudadanía en sistemas informáticos. La iniciativa de voto electrónico que se aplicó en Santo Domingo y Azuay en 2014 recibió críticas y no volvió a implementarse.

Un tercer problema es la falta de acceso a internet en el país. La consejera Estela Acero recordó que hay poblaciones en las que el servicio de electricidad se interrumpe todas las semanas.

El consejero Cabrera expresó su preocupación por el analfabetismo digital en el país. Ante la posibilidad de realizar el voto en los infocentros, también está la posibilidad de que se creen aglomeraciones.

La decisión se tomará con las organizaciones políticas y el COE

Aunque el tiempo es corto, el CNE prevé hacer consultas a las organizaciones políticas y a otras instituciones del Estado sobre cómo debería ser la forma de votación para 2021 en medio de la epidemia.

Una de las consultas que se hará será al Comité de Operaciones de Emergencia (COE), encargado de las medidas de seguridad por el coronavirus.

Además, el CNE creará un reglamento para instalar el consejo consultivo con las organizaciones políticas en medio de la pandemia. De esta manera, los partidos y movimientos políticos podrán expresar su posición frente a las dos opciones de votación en 2021.

No hay una fecha para la decisión.