El contralor Pablo Celi entregó el proyecto de ley en la Asamblea, para que esta promueva la transformación de la institución. El tema está en debate desde septiembre de 2017, cuando la propuesta se entregó al presidente Lenín Moreno.
El contralor Pablo Celi entregó, este 19 de agosto de 2020, al presidente de la Asamblea, César Litardo, un proyecto de ley para transformar a la Contraloría en un tribunal de cuentas . La iniciativa busca cambiar la autoridad unipersonal del contralor por un cuerpo colegiado, compuesto por siete ministros auditores.
La idea es que los miembros del tribunal sean escogidos por diferentes entidades del Estado y organismos de la sociedad. Con este cambio en la institución, se garantizaría un control cruzado y una mejor operación de la Contraloría.
La iniciativa viene desde 2017. En septiembre de ese año, Celi entregó al presidente Lenín Moreno el proyecto de ley, para que éste lo remitiera a su vez a la Asamblea. El Contralor no tiene iniciativa legislativa, por lo que debía hacerlo a través del Ejecutivo, pero nunca lo hizo.
El tema también fue de análisis en el Consejo de Participación Ciudadana Transitorio. En una reunión con Moreno, dejó entrever que sería un tema para consulta popular. Sin embargo, esto tampoco pasó.
Finalmente, la transformación de la Contraloría fue incluida entre los temas que debía resolver la mesa de democracia del Acuerdo Nacional, presidido por el entonces vicepresidente Otto Sonnenholzner. Pero, tampoco hubo resultados.
Cómo funcionaría la institución
El Tribunal de Cuentas del Estado tendría las mismas funciones y competencias previstas en la Constitución para la Contraloría. Los cinco miembros auditores serían designados:
- Dos por la Asamblea Nacional.
- Uno por el Presidente.
- Dos por la ciudadanía, designados por concurso público de méritos y oposición.
- Dos funcionarios de carrera, designados por concurso interno de méritos y oposición.
El período de funciones de los miembros será de seis años, sin opción de reelección y con renovación parcial cada tres años.
El Tribunal de Cuentas del Estado se conformará por un Pleno y dos Salas especializadas. En el proceso de control y determinación de responsabilidades deberán actuar como ponentes ante el Pleno, para la aprobación de informes y emisión de resoluciones de responsabilidades.
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