Miércoles, 24 de abril de 2024

Gestión de riesgos, la deuda pendiente de la campaña electoral

Autor:

Carolina Mella

Actualizada:

4 Ene 2021 - 0:05

Autor: Carolina Mella

Actualizada:

4 Ene 2021 - 0:05

- Foto: Agricultora de Pallatanga, Chimborazo, sacude la ceniza volcánica que afectó sus cultivos en septiembre de 2020. Foto: Carolina Mella / PRIMICIAS

La gestión de riesgos debería ser una política de Estado, pero los candidatos a la Presidencia de la República no la incluyen en sus propuestas de gobierno. El país ha perdido USD 129.500 millones en los últimos seis grandes desastres naturales.

Los ganaderos de Manabí llevan un año sobrellevando la sequía. No quieren que les ocurra lo de 2009, cuando perdieron 10.000 animales por la falta de agua y de una política clara de gestión de riesgos.

Ellos aseguran que ninguna autoridad advirtió en ese tiempo lo que se venía, como tampoco ha ocurrido ahora. 

Se podría pensar que estos fenómenos naturales no se pueden predecir, pero la experta en economía y en recuperación post-desastre, Carolina Portaluppi, quien es parte del Colectivo Ecuador con Gestión de Riesgos, asegura que “los desastres no son naturales, son un riesgo mal manejado”.

Hay cuatro factores que definen a ese riesgo: 

  • Las amenazas: Como los sismos, las inundaciones o un derrame de petróleo. 
  • La vulnerabilidad: Como las condiciones económicas, territoriales, de edad, género o discapacidades. 
  • Las capacidades: Aquellas que se construyen y nos hacen más susceptibles o más fuertes ante una amenaza.
  • El nivel de exposición: Factores externos que se suman a una vulnerabilidad.

Los seis últimos grandes desastres que ha vivido el Ecuador, desde El Niño de 1982 hasta el terremoto de 2016, han acumulado USD 129.500 millones en pérdidas económicas, según cálculos del Colectivo Ecuador con Gestión de Riesgos. 

“Sin contar los más de USD 6.000 millones en pérdidas que, según el gobierno, la pandemia del coronavirus ha dejado en los primeros tres meses”, agrega Portaluppi. 

“Para reducir el riesgo de un desastre, hay que gestionar esos riesgos” a través de análisis, monitoreos y establecer sistemas de alertas.

Como, por ejemplo, “los sensores de sismos, que con unos segundos de anticipación le da tiempo a la gente a reaccionar”, explica Portaluppi. 

El Colectivo hizo un análisis de las propuestas de gobierno de los 16 candidatos a la Presidencia aprobados por el Consejo Nacional Electoral (CNE)

Y encontraron que sólo seis candidatos mencionan el tema. “No hay una visión estratégica en pensar que el desarrollo del país sea sostenible y resiliente”, dice Portaluppi.

“Lamentablemente la gente que llega no sabe del tema. Sabe, probablemente, sobre construir una vivienda, pero muy poco de reducir el riesgo”.

Las soluciones que se han advertido en cada desastre

Gestionar el riesgo de desastre implica repensar los modelos de desarrollo. Significa que todo lo que construyan los gobiernos deben tener un bajo nivel de exposición a un desastre. 

Y optimizar los recursos económicos de esas inversiones. 

Como el proyecto hidroeléctrico Daule-Vinces (Dauvin), que fue construido por la constructora Odebrecht, una obra que supuestamente no costaría más de USD 200 millones y, para su inauguración en 2015, superó los USD 352 millones. 

La idea era crear un trasvase para asegurarles agua a los agricultores en el verano y controlar inundaciones en el invierno. Pero no ocurrió. 

El presidente de la Federación de Productores de Banano, Fraklin Torres, relata que “dejaron muchos ríos y canales tapados, que han provocado inundaciones en años anteriores en la zona baja de Vinces”.

Según Torres, se han perdido fincas desde entonces.

"Se ha provocado un perjuicio al sector productor, en el verano, ninguna de estas áreas recibe agua de este proyecto. Todavía deben usar los pozos”.

Franklin Torres, presidente de la Federación de Productores de Banano

Agrega que el país necesita que la reducción de riesgos y desastres sea una política de Estado transversal en todo el gobierno, y que no solo lo apliquen los que están en el poder temporalmente, sino que se mantenga con el tiempo. 

Las tres propuestas que los candidatos deberían tener en su plan de gobierno

Dentro de la fórmula de riesgo, el factor más importante es la reducción de la vulnerabilidad, y eso es prevenible, explican los expertos. 

“Hay que invertir en conocimiento científico, fortalecer a los institutos que hacen monitoreo de posibles desastres y construir vivienda resiliente”, señala Carolina Portaluppi. 

Y propone tres cosas que debería hacer el Presidente de la República en prevención en Gestión de Riesgos:

  1. Un plan de desarrollo, donde la prevención de riesgos y desastres lo atraviese de principio a fin. Toda la inversión pública debe tener ese enfoque. 
  2. La narrativa de los candidatos no está conectada con lo que ha ocurrido en el país en el último tiempo, cuando se ha retrocedido 15 años en temas de pobreza. 
  3. No se puede dejar de invertir en los institutos de monitoreo de posibles desastres. Fortalecer la institucionalidad, la gobernanza y las reglas a través de una buena ley que regule el sistema de gestión de riesgos.