El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, anunció una reunión del COE Metropolitano para tomar nuevas medidas frente a la jornada de violencia que vive el país.
Las calles y avenidas de Quito colapsaron la tarde del 9 de enero de 2024 con decenas de conductores que buscaban llegar a sus viviendas, luego de que el presidente Daniel Noboa reconociera la existencia de un conflicto armado en el país.
Avenidas como la Brasil, Amazonas, Galo Plaza Lasso y 10 de Agosto lucieron abarrotadas de vehículos, la igual que la Shyris, Napo y Teniente Hugo Ortiz.
El Metro, Trolebús y Ecovía también enfrentaron una alta demanda de usuarios, provocando largas filas en sus paradas y estaciones.
Decenas de usuarios hacen una larga fila en la parada Casa de la Cultura de Quito, el 9 de enero de 2024. Santiago Ron
El alcalde Pabel Muñoz admitió que la salida de estudiantes y trabajadores provocó un alto tráfico en la ciudad. Aunque aseguró que el sistema metropolitano de transporte funciona normalmente.
La Empresa Metropolitana Metro de Quito insistió en que la operación de este medio de transporte se extenderá hasta las 22:00, mientras que el Trolebús y la Ecovía lo harán hasta las 22:30
"Todos los servicios de transporte municipal funcionan con normalidad, aunque hay mucha más demanda. 500 agentes de tránsito ayudan a gestionar el tráfico en distintos puntos de la ciudad", indicó en su cuenta de X.
Además, recordó que el Municipio suspendió la medida de restricción vehicular pico y placa "para que las personas puedan adelantar sus traslados".
Y anunció que mantendrá una reunión urgente con las autoridades que conforman el Comité de Operaciones de Emergencia Cantonal para evaluar la situación de la ciudad y anunciar nuevas medidas.
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