Las personas con inmunidad híbrida, o sea quienes tuvieron Covid-19 y se vacunaron, tienen un 42% menos de probabilidades de volver a contagiarse.
Un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en colaboración con Unity Studies y SeroTracker, concluye que la 'inmunidad híbrida' contra el Covid-19 se mantiene a niveles muy altos incluso después de un año.
Esta inmunidad es aquella que se desarrolla por haber tenido la enfermedad y por vacunarse. El estudio concluye, además, que la 'inmunidad híbrida' ofrece mayor protección que la desarrollada simplemente por pasar la enfermedad.
Con ello se refuerza la idea de que es recomendable vacunarse, incluso habiendo tras haberse contagiado de Covid-19.
Según el estudio, apoyado en datos de 26 investigaciones, después de un año de inmunidad híbrida, un paciente tiene 95% menos posibilidades de desarrollar formas graves de la enfermedad que requieran hospitalización.
El porcentaje baja al 75% con la inmunidad simple de antiguos enfermos no vacunados.
La protección contra una reinfección de Covid-19 es más baja en ambos casos, pero también aquí la inmunidad híbrida tiene ventajas, ya que las posibilidades de volver a enfermar bajan un 42%, mientras que para los no vacunados solo un 25%.
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