Jueves, 18 de abril de 2024

La expansión inmobiliaria amenaza a la fauna de la vía a Daule

Autor:

Redacción Primicias

Actualizada:

12 Abr 2021 - 0:03

La semana pasada las redes sociales compartieron la imagen de un tigrillo merodeando una de las urbanizaciones de la vía a Daule. El sonido de las canteras de piedra los obliga a huir de su hábitat natural.

tigrillo

Autor: Redacción Primicias

Actualizada:

12 Abr 2021 - 0:03

Imagen del tigrillo que ingresó a una de las urbanizaciones en la vía a Daule, Guayas. - Foto: Twitter Rescate Animal

La semana pasada las redes sociales compartieron la imagen de un tigrillo merodeando una de las urbanizaciones de la vía a Daule. El sonido de las canteras de piedra los obliga a huir de su hábitat natural.

Las imágenes de un tigrillo adulto deambulando por una de las zonas urbanas de la vía a Daule se robó, de momento, el debate en las redes sociales la semana pasada.

En Twitter se colocaron fotos en las que parecía haber sido impactado por un auto en la avenida León Febres Cordero. Esta es una larga vía de varios carriles en la que transitan, a la par, vehículos livianos y camiones.

En otras imágenes, se lo veía caminando sobre el adoquín y el asfalto, mientras una persona trata de alejarlo de la transitada vía utilizando una alfombra.

Todo esto ocurrió al pie de la Urbanización La Rioja, uno de los nuevos proyectos inmobiliarios que se levantan en el cantón Daule.

La parroquia dauleña de La Aurora es una muestra del boom inmobiliario de la zona. Pasó de ser rural a ser urbana.

En 2006 tenía unos 3.000 habitantes, frente a las más de 87.000 personas que registra ahora en su zona urbana. La mayoría de la población está distribuida en un centenar de urbanizaciones privadas.

"Estas ciudadelas están construidas al pie de cerros que tienen este tipo de animales", explica Eliana Molineros, de la fundación Proyecto Sacha.

Pero, ¿por qué el tigrillo fue encontrado en las calles lejos de su hogar natural?

Molineros responde lo siguiente: "Lo que sucede es que están depredando su territorio, su hábitat y ellos están obligados a huir y en esa huida se encuentran con carreteras".

Los vecinos, que alertaron de la presencia del animal, apuntaban hacia las canteras que operan en el sector, donde además existe deforestación.

"Las explosiones atontan a los animalitos, los desubican", explica un miembro de la Policía Ambiental. "Somos nosotros los que invadimos sus hogares, no ellos los de nosotros", señala.

Inspecciones en marcha 

Tras las denuncias de los habitantes, se realizó un operativo conjunto entre el Ministerio de Ambiente y la Policía Ambiental, donde se comprobó el nivel de los daños que produce la actividad minera en la zona.

Luego de la inspección se solicitó al Municipio de Daule un informe de la situación, antes de aplicar las sanciones correspondientes.

PRIMICIAS pidió una versión del alcalde, pero hasta el cierre del reportaje no obtuvo respuesta.

"Todo esto inicia con canteras y cuando ya todo está depredado, ya pueden urbanizar", agrega Molineros del proyecto Sacha.

La expansión inmobiliaria de la zona se explica por la falta de oferta de inmuebles en el centro de Guayaquil y la conectividad que tiene el lugar con la capital económica de Guayas.

Además de la seguridad que brinda el vivir en un conjunto privado.

"Es más fácil conseguir el permiso para construir una casa que un edificio", añade Molineros.

Se busca un tigrillo

Los operativos para dar con el paradero del tigrillo continúan. Lo último que se supo del animal es que se internó en la maleza.

"Hemos hablado con los guardianes de las urbanizaciones del sector, también con los pobladores para que nos avisen si lo ven", señala el miembro de la Policía Ambiental.

El procedimiento al ver un animal silvestre es dar parte al servicio de emergencias ECU-911 de manera inmediata. Ellos sabrán comunicar a los organismos encargados de socorro animal.

Conservacionistas y policías ambientales aconsejan no tratar de capturarlo "para después ir a entregarlo". Pueden resultar heridos tanto el humano como el animal.

"Ellos liberan mucha adrenalina, mucho cortisol para tratar de escapar, lo que puede matarlos en 48 horas", puntualiza Molineros.