Cuánta plata necesita el Gobierno de Noboa para lo que resta de 2025 y para 2026 ; ya alista los nuevos presupuestos
El Ministerio de Finanzas presentará dos presupuestos en 2025, le explicamos por qué y cuáles son los mayores desafíos para la caja fiscal.

Imagen referencial de la ministra de Finanzas, Sariha Moya, durante una sesión de directorio del Banco CAF en España, 29 de junio de 2025.
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Igual que un hogar en el que las finanzas deben ir ordenadas en un presupuesto con el registro de ingresos, gastos y pagos de deudas, el Estado ecuatoriano también requiere uno para la administración de los recursos del país, que año a año es elaborado por el Ministerio de Finanzas.
Y en lo que queda de 2025, el Ministerio de Finanzas tiene el reto de presentar dos proformas de ese presupuesto estatal; es decir, los documentos y que mostrarán cuánto dinero necesita el Gobierno de Daniel Noboa para sostener al Estado.
¿Por qué dos proformas presupuestarias?
Por un lado, Finanzas tiene que presentar hasta agosto de 2025 a la Asamblea Nacional una proforma presupuestaria para lo que queda de 2025.
Esto, debido a que este fue un año electoral, por lo que el Gobierno ha estado usando una "proforma prorrogada"; es decir, un presupuesto que usa los mismos datos de 2024.
Por ejemplo, el Presupuesto 2024 preveía gastos por USD 23.088 millones e ingresos por USD 25.621 millones (sin contar lo previsto en endeudamiento).
Pero una vez que Noboa ganó la reelección presidencial y se posesionó el 24 de mayo pasado, la ley manda que el Ministerio de Finanzas elabore un presupuesto nuevo para lo que queda del año, el cual debe ser presentado hasta el 24 de agosto de 2025.
Y a estas alturas, la entidad puede hacerlo con cifras más acordes a la realidad actual del país, una vez que ya ha transcurrido más de la mitad de 2025.
Por ejemplo, el presupuesto prorrogado contemplaba recursos por la concesión del campo petrolero Sacha, que no se concretó.
Y la segunda proforma que debe presentar Finanzas hasta el 1 de noviembre de 2025, es para el presupuesto estatal de 2026. Esta será una proforma para el año completo.
¿Cuáles son los desafíos del Gobierno con el Presupuesto?
Reducir la brecha entre los ingresos y gastos es el mayor desafío para el Ministerio de Finanzas, a cargo de su titular, Sariha Moya.
Cuando los gastos son mayores a los ingresos en el presupuesto estatal se crea lo que se conoce como déficit fiscal y el país debe cubrirlo con endeudamiento.
¿Cómo va hasta ahora el déficit del Presupuesto? Según el último reporte del Ministerio de Finanzas, publicado el 8 de julio de 2025, el Presupuesto entre enero y mayo de 2025 tiene un déficit de USD 1.255 millones.
Y eso es preocupante porque muestra que los gastos están creciendo a un ritmo mayor que en 2024, por lo que el déficit del Presupuesto en 2025 podría terminar siendo más alto que el año pasado, dice José Hidalgo, director general de la Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes).
En 2024, el déficit fiscal fue de alrededor de USD 3.400 millones.
No obstante, la ministra Moya ha dicho que se espera que en 2025 el déficit del Presupuesto del Estado sea de alrededor de USD 3.000 millones.
Cordes cuestiona esa meta. Esto, porque para el período de enero a mayo de 2024, el Presupuesto del Estado todavía no registraba un déficit, más bien, para ese momento había un superávit; esto es, los ingresos eran superiores a los gastos en USD 364 millones resalta Hidalgo.
"Así es casi incuestionable que el déficit del Presupuesto en 2025 será mayor que el de 2024 que fue de USD 3.400 millones. El déficit podría llegar hasta a unos USD 5.000 millones este año", añade Hidalgo.
El vocero de Cordes explica que el escenario en 2025 será más complicado. Y esto en parte, porque será difícil que el Estado reciba una cifra similar o mayor por recaudación de impuestos frente a la que tuvo en 2024, que fue una cifra récord producto del alza del IVA y del ISD, así como por otras medias temporales que ya no están vigentes en 2025.
Además, Hidalgo menciona que el presupuesto ha estado golpeado en 2025 porque ha tenido menos ingresos petroleros por caída de precios pero también por menos producción.
Y este problema se seguirá agudizando tras la caída de producción petrolera por la suspensión del transporte de crudo en los oleoductos Sote y OCP por la erosión regresiva del río Coca y las fuertes lluvias en lo que va de julio de 2025, añade.
¿Cómo lograr el equilibrio entre ingresos y gastos?
Un mayor déficit fiscal es un problema para el Estado porque Ecuador tiene poco espacio para conseguir préstamos que le ayuden a pagar esa brecha, dice Hidalgo.
Con un riesgo país de alrededor de 800 puntos, si Ecuador busca recursos en el extranjero a través de la emisión de bonos tendría que pagar una tasa de interés de alrededor de 12,5% anual.
Esto es más costoso si se compara por ejemplo con la tasa de interés de la deuda que Ecuador tiene con organismos multilaterales, que es de 4,7% anual en promedio hasta abril de 2025.
Con este escenario complejo, el Gobierno de Noboa ya pidió el pasado 11 de junio de 2025 un aumento del préstamo vigente al Fondo Monetario Internacional (FMI) por USD 1.000 millones adicionales a los USD 4.000 millones que ya fueron aprobados en mayo de 2024.
Pero, lo más probable es que si el directorio del organismo lo aprueba, esos recursos se dividirán para los años que quedan pendientes del programa con el FMI, que es hasta 2028.
De ahí que otra alternativa a la que suelen recurrir los ministros de Finanzas en este escenario de falta de préstamos es atrasarse en los pagos a los proveedores del Estado, a la seguridad social o a los gobiernos locales.
Hasta junio de 2024, el Gobierno ya acumula USD 938 millones en atrasos.
¿Cuál es el plan frente a este escenario? El Ministerio de Finanzas tiene dos vías para reducir el déficit, aumentar ingresos y reducir los gastos.
Para la proforma de 2025, una alternativa podría ser que el Gobierno reduzca gastos a través de una focalización del subsidio al diésel, dice Cordes. Aunque esta ha sido una propuesta analizada en el pasado, ha causado fuertes protestas y oposición de transportistas y de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie).
Para aumentar los ingresos hace falta una nueva reforma tributaria en 2025, aunque los efectos se verían en 2026. "Esto es más probable de esperar para el próximo año porque los cambios tributarios, por ejemplo en Impuesto a la Renta, son de cobro anual", añade Hidalgo.
Cordes propone también propone que el Estado recorte gastos con reformas a las asignaciones que hace el Gobierno Central a los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD) (municipios, prefecturas, juntas), que cada año representan alrededor de USD 3.000 millones al Estado.
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