Comúnmente las personas están acostumbradas a ver los logotipos de automóviles en las calles y carreteras de las ciudades, anunció y concesionarios, y es que este elemento es un signo importante de la identidad de las empresas de vehículos.
Más allá de servir para que los usuarios reconozcan los autos, los íconos guardan curiosas historias de su origen e impacto a nivel mundial.
Los logotipos mantienen los símbolos que representan, ya sean lugares de nacimiento, ubicación, animales, escudos de armas y curiosidades.
Un logo debe tener 2 características esenciales para llegar a la mente de los consumidores:
- Ser un sinónimo de la empresa o del producto a representar
- Contar con elementos fáciles de recordar.
Uno de los momentos claves para toda de empresas sucede cuando deciden renovar su identidad, cambiar su visión y el enfoque de sus productos. Cada que una marca decide innovar visualmente, esto representa una nueva era institucional.
Una marca ejemplo de renovación es Renault Ecuador, quienes decidieron iniciar este año presentando su nuevo logo mediante la campaña “Reescribe la Historia”. Esta iniciativa incorpora imágenes representativas de la cultura, paisajes, lugares y fechas del Ecuador.
A lo largo de su historia, Renault ha cambiado su identidad visual varias veces. Pero hay una cosa que no ha cambiado desde 1925 y es la forma de diamante que sirve como base para el logotipo.
El cambio de identidad de Renault tiene como objetivo que los ecuatorianos se identifiquen con la marca y que sean parte del cambio al compartir la idea ¡Reinventarse es esencial para avanzar!
Las historias que nunca se olvidan son las que se reinventan para escribir los mejores capítulos.
Asimismo, la empresa plantea un impacto social mediante su nueva visión mediante la concienciación de actividades diarias como respetar el paso cebra, ceder el paso, no usar el celular al conducir, etc.