4,8 millones de personas decidieron no votar por Guillermo Lasso ni Andrés Arauz, sino por uno de los otros 14 postulantes que constaban en la papeleta de la primera vuelta.
A un poco más de una semana de las elecciones, los candidatos que no lograron pasar a la segunda vuelta van alineándose. Aunque su apoyo a una u otra tendencia no necesariamente se traduce en votos, los expresidenciables se han pronunciado por las tres opciones que quedan: Andrés Arauz, del correísmo; Guillermo Lasso, de la alianza Creo-PSC, o el voto nulo.
Los 14 candidatos que no lograron llegar a la segunda vuelta suman 4,8 millones de votos, que tanto Arauz como Lasso buscan captar. La tarea es difícil, pues en una elección polarizada como la actual ambas opciones generan rechazo.
De momento, Lasso acumula seis apoyos, mientras que Arauz solo dos, uno de los cuales no es al 100%. En otra orilla está el voto nulo, impulsado por Yaku Pérez, de Pachakutik.
Los respaldos a Arauz
El candidato de la alianza correísta solo ha logrado sumar dos apoyos: el de su anterior tienda política, Alianza PAIS, y el de Isidro Romero, quien fue el candidato del partido Avanza, también exaliado de Rafael Correa.
Ximena Peña, la candidata de Alianza PAIS, aseguró que revisaron los planes de gobierno de ambos candidatos, y decidieron que no votarán por Lasso. Por tanto, sus opciones serán Arauz, el nulo o el blanco.
En el caso de Isidro Romero, el apoyo no ha sido de frente. Pero, el excandidato ha promovido en sus redes sociales videos en los que usa el nuevo ícono de campaña de Arauz, y también ha criticado a Lasso.
Avanza, el partido que impulsó la postulación de Romero, se ha desmarcado de esta posición. A través de un comunicado, informó que Romero no es militante de esa organización. Tampoco expresaron su apoyo a Arauz o Lasso.
Los votos de Peña y Romero en la primera vuelta suman 315.874.
Los respaldos a Lasso
Guillermo Lasso ha recibido el apoyo en la segunda vuelta de César Montúfar (Concertación), Guillermo Celi (Suma), Gustavo Larrea (Democracia Sí), Lucio Gutiérrez (PSP), Pedro José Freile (Amigo) y Xavier Hervas (ID). Todos ellos suman 1,99 millones de votos en la primera vuelta.
El más importante es el de Hervas, que se ubicó en el cuarto lugar en la primera vuelta y que acumuló importante votación, sobre todo, en Quito. Este apoyo, sin embargo, ya se vio empañado de disputas en la Izquierda Democrática, que se mantiene en la posición de no apoyar a ningún candidato.
El de Freile también es importante, pues aunque su votación no llegó a superar el 3%, se ubicó en el quinto lugar en los resultados de la primera vuelta. Y tanto él como Hervas se posicionaron durante la campaña como nuevas alternativas políticas.
¿Qué significa el apoyo?
El apoyo de los excandidatos no se traduce directamente en votos, pues al final la decisión es de los electores. Un ciudadano no va a decidirse por un candidato solo por que su primera opción se lo dice.
Esto ya se ha visto en elecciones anteriores: un ejemplo claro es la de 2017, cuando los finalistas fueron el mismo Lasso y el actual presidente Lenín Moreno, entonces respaldado por Correa.
En ese entonces, la mayoría de candidatos que no logró pasar a la segunda vuelta plegaron por Lasso; entre ellos, Cynthia Viteri, la candidata del PSC y que obtuvo 16,32%. Paco Moncayo, quien quedó en cuarto lugar en esa elección con el 6,71%, decidió no respaldar a ningún candidato.
Pero los apoyos no fueron suficientes, pues Moreno ganó la presidencia con apenas un punto porcentual de diferencia.
La diferencia en esta elección es que es más alto el número de votos "disponibles" -los que no votaron por las opciones que van a la segunda vuelta-. En 2017, Lasso y Moreno sumaron en la primera vuelta 6,37 millones de votos. Mientras que en 2021, Lasso y Arauz acumulan 4,86 millones de sufragios.
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