Viernes, 19 de abril de 2024

Crisis política e inseguridad marcaron a Ecuador en 2022

Autor:

Carolina Mella

Actualizada:

31 Dic 2022 - 5:26

La inseguridad, los 18 días de manifestaciones, las tensiones políticas entre el Ejecutivo y la Asamblea, la crisis en el Consejo de Participación Ciudadana y en la Función Judicial fueron noticia el año que termina.

Manifestantes en el centro norte de Quito, el 22 de junio de 2022.

Autor: Carolina Mella

Actualizada:

31 Dic 2022 - 5:26

Manifestantes en el centro norte de Quito, el 22 de junio de 2022, tras una crisis política con el Ejecutivo. - Foto: Adriana Noboa/PRIMICIAS

La inseguridad, los 18 días de manifestaciones, las tensiones políticas entre el Ejecutivo y la Asamblea, la crisis en el Consejo de Participación Ciudadana y en la Función Judicial fueron noticia el año que termina.

El año 2022 estuvo marcado por la inseguridad, las tensiones políticas y los conflictos entre los poderes del Estado.

Guillermo Lasso había cumplido su primer año como Presidente y ya se votaba por su destitución en la Asamblea Nacional, que no alcanzó el acuerdo de todos los legisladores.

El hecho ocurrió en medio de un paro nacional que duró 18 días y dejó ocho muertos, cientos de heridos y millones de dólares en pérdidas.

Pero las manifestaciones permitieron conformar mesas de diálogos entre el Gobierno y los sectores sociales, en las que se llegaron a 128 acuerdos, aunque no eliminó la sombra de nuevas protestas para 2023.

La inseguridad marcó el pulso de la sociedad y de la economía, sobre todo en las provincias que son parte del corredor del tráfico de droga hacia el Pacífico, como Esmeraldas, Manabí, Guayas, Santo Domingo, Santa Elena, Los Ríos y El Oro.

El 90% de los crímenes de todo el país se ha registrado en estas siete provincias. 

Y en un intento por controlar la situación, el Gobierno ha decretado cuatro estados de excepción, para que los militares puedan vigilar las calles, y un toque de queda que afectó a la economía.

Según las autoridades, las muertes violentas y la inseguridad que se registran en el país se deben a un conflicto entre bandas. 

Pero las armas han liquidado a personas que no tienen conexión con la delincuencia. Muchos han sido incluso niños y jóvenes. 

El país cierra el año con 4.550 muertes violentas, que superan a los 2.115 que se registraron en 2021, lo que significa una tasa de 26 homicidios por cada 100.000 habitantes, la más alta de su historia.