Impulsando el cambio social y ambiental: mujeres ecuatorianas con emprendimientos que dejan huella
Los emprendimientos que buscan generar impactos sociales y ambientales crecen en Ecuador y ejemplo de ello son estas iniciativas creadas en Quito, Guayaquil y Cuenca. Conozcan cómo funcionan estos negocios y cómo hacerlos económicamente sostenibles.

Camila Vásquez, Mónica Torres y María Eugenia y Diana Moreno crearon emprendemientos con propósito en Ecuador.
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Las mujeres en Ecuador no sólo lideran emprendiemientos por el ingreso económico que puedan representar, sino que también están creando negocios que buscan generar un impacto social y ambiental.
Las ideas de ingreso están acompañadas de un interés por hacer un cambio, involucrar a los clientes y dejar una huella positiva en el mundo.
En eso coincidieron Camila Vásquez y Mónica Torres cuando pensaron en su idea de negocio. La primera le da más usos a las prendas de vestir para evitar la contaminación, y la segunda, vende productos al granel para promover un consumo responsable y que limite los empaques de una sola vida.

¿Cómo funcionan los emprendimientos con propósito?
La lógica de estos negocios es el triple impacto: económico-social-ambiental. Así lo explica Diana Moreno, especialista en Finanzas Sostenibles.
“Estos emprendimientos ofrecen productos o servicios que resuelven un problema social y ambiental, sin dejar de ser competitivos en el mercado”.
Diana Moreno
Otra de las características es que reinvierten parte de sus utilidades en una causa para mejorar procesos sostenibles dentro de su empresa, miden su impacto con indicadores claros como: huella de carbono, número de beneficiarios o empleos creados.
Moreno destaca que el cimiento de estos negocios es tener una gobernanza consciente “donde las decisiones consideran no solo el beneficio económico, sino el impacto en la comunidad y en el ambiente”.

Cómo iniciar con un negocio sustentable
Tanto Vásquez como Torres comenzaron sus emprendimientos por un gusto y un reto personal, investigaron y definieron su causa.
Moreno se metió al mundo de las finanzas sostenibles por la conexión con valores familiares. Su mamá creó Ecuambiente, una consultora que busca transformar a las industrias en sostenibles.
Basada en su experiencia comparte esta lista de consejos para crear un negocio sustentable:
- Identificar un problema real: encontrar la necesidad ambiental-social concreta para cubrirla.
- Definir un propósito: establecer un objetivo claro que combine el impacto positivo con la viabilidad económica.
- Investigar el contexto local y global: conocer las regulaciones, tendencias, actores claves, oportunidades de colaboración.
- Definir un modelo de negocio sostenible: se puede apoyar con herramientas de Internet y con inteligencia artificial.
- Involucrar a la comunidad: ver qué pasa en el área de influencia, se puede tener un valor compartido con varios grupos de interés para tener réditos a largo plazo y ser sostenibles.
- Investigar redes de apoyo y financiamiento: incubadoras, fondos de impacto, alianzas con ONGs y empresas privadas.
Recuerda que en Ecuador existen empresas denominadas de Beneficio e Interés Colectivo o BIC que constan en la Ley de Emprendimiento e Innovación.
Emprendimientos con propósito
Aquí unos ejemplos de emprendimientos con un propósito social y ambiental:
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Cuenca: más vida a la ropa y menos contaminación
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Camila Vásquez tiene 30 años. Hace cinco buscaba generar un negocio basado en el gusto por la moda.
Comenzó a investigar y descubrió que la moda es la industria que más contamina en el mundo y que en las fábricas hay además injusticias sociales y económicas, se producen tantas colecciones al año y que las tendencias cambian demasiado rápido.
Conoció los beneficios de la moda sostenible y circular. En medio de la pandemia vio una oportunidad de iniciar con la venta de ropa de segunda mano y creó ‘¿Qué me pongo? Second Hand’. Descubrió que a muchas personas les gustaba utilizar ropa usada, tanto por la moda vintage y por la causa ambiental.
Prendas de vestir del emprendimiento sustentable '¿Qué me pongo? Second Hand', de Cuenca.Instagram @quemepongo_cuenca Su negocio funciona de la siguiente manera: compra prendas usadas, las selecciona, las lava, desinfecta, las remienda si es necesario, las plancha y las pone a la venta.
Con su habilidad para combinar prendas y manejar redes sociales, en una vivienda patrimonial en las calles Benigno Malo y Presidente Córdova, ha llegado a más clientes y ha permitido que más de 5.000 prendas puedan ser “amadas nuevamente”.
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Guayaquil: Venta al granel con un valor ambiental
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Mónica Torres, de 37 años, tiene un emprendimiento de venta de productos al granel en Urdesa y Ceibos, en Guayaquil. En 2019 se planteó como reto personal iniciar con un negocio que no solo sea un sustento económico, sino que agregue un valor a la sociedad y al planeta.
Junto a su pareja Fernando Pozo hicieron una lluvia de ideas. “Buscamos un negocio que sea saludable, pero que tenga coherencia”, comenta Torres. Con la venta al granel buscaban que los clientes consuman lo necesario, se reduzcan desperdicios y se usen menos empaques. Así nació ‘Al peso’.
Productos de venta al granel en 'Al Peso', un emprendimiento con propósito en Guayaquil.cortesía Al Peso Una de las cosas más complejas para Torres fue encontrar a los proveedores porque vendían productos empacados y no al granel. En medio de los muchos ‘no’ hubo otros que se abrieron al formato de comercio que buscaba.
El concepto llamó la atención de los clientes y la pandemia les ayudó porque no cerraron y en esa preocupación por alimentarse mejor, buscaron productos saludables.
En 'Al Peso' venden frutos secos, harinas saludables, levadura tradicional, miel y aceites al granel, pollos orgánicos, fermentados, tienen líneas de cosméticos y de limpieza bajo el mismo concepto.
Torres reconoce que no todos los productos pueden estar libres de empaques, pero está convencida que en el tema ecológico es mejor la imperfección. “Si es muy brusco, no es sostenible. Hacerlo parte de tu vida, eso es sostenible”.
Tienda de 'Al Peso', en Guayaquil, que promueve la venta de productos al granel.cortesía Al Peso
Hacia a dónde apuntan los emprendimientos
Diana Moreno, especialista en Finanzas Sostenibles, también habla desde la experiencia. Junto a su hermana María Eugenia dirigen Kapari, ubicado en medio del bosque tropical del Chocó Andino, en Quito, que ha encontrado en el ecoturismo una herramienta sostenible para impulsar proyectos ambientales de reforestación y recuperación de la fauna y flora nativas e incentivar la productividad local en la zona de operación.

Afirma que las mujeres en Ecuador están buscando hacer alianzas, articular proyectos con organizaciones que tengan una misma visión y valores para trabajar en objetivos comunes y tener un mayor impacto.
Ejemplo de ello es T’inki, Centro de Pensamiento del Futuro, de la cual Moreno es miembro fundador. Se trata de una plataforma colaborativa independiente que conecta empresas, gobiernos, academia y comunidades para impulsar la transición ecológica en Ecuador y América Latina.
“Estamos viendo que la reutilización de recursos, del cero desperdicio, el diseño regenerativo están siendo un pilar importantísimo en los negocios de las mujeres”.
Diana Moreno
Otra de las áreas de acción es la inclusión y la equidad de género.
Cómo hacerlas económicamente sostenibles
Para Moreno, las empresas con propósito ya tienen un diferenciador en el mercado y una forma que los negocios sean económicamente sostenibles es con el poder de la comunicación. La innovación y la creatividad van a tener un rol importante para ser más visibles, pues a los clientes que compraron con propósito se pueden sumar otros nuevos.
“El consumidor ya está cambiando, ya se está transformando y para todos los emprendimientos tenemos que comunicar qué estamos haciendo, cómo lo estamos haciendo y cómo somos diferentes”.
Diana Moreno, especialista en Finanzas Sostenibles
Otra forma de hacerlo sostenible es con la diversificación de ingresos a través de consultorías, formación, asesorías, fuentes de apoyo económica con empresas que tienen responsabilidad ambiental, alianza con comunidades y entidades.
Además, es importante buscar la eficiencia operativa sin perder el propósito.
“Ya hay gente que paga un poquito más por emprendimientos con propósito, lo que tenemos que hacer es que esta comunidad se haga masiva”.
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