La Superintendencia de Bancos realizó una supervisión a los fideicomisos y detectó que la información remitida por el BIESS es poco confiable y no permite conocer el estado actual de los negocios fiduciarios.
Los 55 negocios fiduciarios del Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (BIESS) no cuentan con un plan ni con una estrategia para solucionar sus problemas en el ámbito financiero, legal, comercial y técnico.
Esa fue una de las conclusiones de un análisis que realizó la Superintendencia de Bancos a los 55 fideicomisos del BIESS, con corte a diciembre de 2019.
De ese total, 42 fideicomisos inmobiliarios, donde la Seguridad Social ha invertido USD 600 millones, están paralizados desde hace cuatro años, ocasionando pérdidas económicas, todavía sin cuantificar.
El dinero del BIESS está invertido en negocios como la construcción de viviendas, locales comerciales, edificios, oficinas y hasta en proyectos estratégicos.
La Superintendencia de Bancos concluyó que, más allá de las deficiencias señaladas, los constantes cambios de administradores en el BIESS complican la situación de los 55 fideicomisos.
Entre junio de 2010 y julio de 2020 han pasado 15 gerentes por la administración del BIESS. Actualmente, la gerencia del banco de la Seguridad Social está a cargo de Diego Burneo, quien asumió las funciones el 15 de junio de 2020.
La Superintendencia de Bancos evidenció varios problemas en los fideicomisos, con base a información presentada por el BIESS. Entre ellos destacan:
- El Banco no conoce la situación real de los fideicomisos a pesar de contar con un área especializada y con Gerentes de Proyecto.
- No hay un plan comercial (estudios de mercado) ni se conocen el avance de las obras de esos negocios inmobiliarios.
- La Superintendencia de Bancos detectó que no hay evidencia documental sobre las reuniones de las juntas de fideicomisos, que debían seguir el avance de los negocios.
- No hay información sobre el estado actual de los bienes que conforman los fideicomisos.
Los negocios inmobiliarios, por ejemplo, también tienen sus problemas específicos. La Superintendencia de Bancos detectó en el análisis al menos cinco.
En esta lista están:
- Se registran problemas con los contratistas de las obras y anticipos sin devengar.
- Bienes que no se han vendido con mucho tiempo de antigüedad.
- Existen proyectos que fueron iniciados sin contar con todos los aspectos técnicos, comerciales, legales y financieros.
- La información financiera de los proyectos es poco confiable o nula y no permite tener certeza del estado actual de las inversiones.
- No hay resultados sobre los procesos de coactiva.
Pero el análisis no es completo. ¿Por qué? El BIESS no proporcionó información sobre los estados financieros de al menos, el 36% de los negocios fiduciarios, a la Superintendencia de Bancos.
Con ello, la Superintendencia no pudo confirmar el costo total de cada proyecto, el detalle de las inversiones, el valor de los anticipos, las cuentas por pagar a los proveedores y la rentabilidad o pérdida del negocio fiduciario.
La entidad tampoco pudo comprobar si los fondos de reserva usados para esas inversiones (negocios fiduciarios) fueron restituidos a las cuenta del BIESS.
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