Viernes, 03 de mayo de 2024

Con el cierre del ITT, producción de petróleo de Ecuador vuelve a niveles de 2003

Autor:

Mónica Orozco

Actualizada:

23 Feb 2024 - 5:40

El Gobierno proyecta que la producción petrolera caerá 10% en 2024 de cerrarse el ITT, mientras los planes de inversión siguen estancados.

Instalaciones petroleras de Petroecuador, enero de 2024.

Autor: Mónica Orozco

Actualizada:

23 Feb 2024 - 5:40

Instalaciones petroleras de Petroecuador, enero de 2024. - Foto: Petroecuador

El Gobierno proyecta que la producción petrolera caerá 10% en 2024 de cerrarse el ITT, mientras los planes de inversión siguen estancados.

La Proforma presupuestaria del Estado para 2024 refleja el golpe que sufrirá la producción petrolera nacional, una vez que se cierre el bloque ITT.

Así, según ese documento, que deberá ser tratado por la Asamblea, la producción petrolera nacional se hundirá a 427.397 barriles diarios, el nivel más bajo desde 2003.

Y es que en agosto de 2024 deberá extraerse el último barril del campo petrolero Ishpingo Tambococha Tiputini (ITT), ubicado en el parque Yasuní en la Amazonía ecuatoriana.

Es el plazo que dio la Corte Constitucional para cumplir el mandato de la mayoría de ecuatorianos que votó a favor del abandono de la extracción del ITT, en unos comicios extraordinarios realizados en agosto de 2023.

Es, además, un 10% menos o una caída de 47.852 barriles diarios de petróleo frente a lo producido por el país en 2023, que fueron 475.249 barriles diarios.

Para el exgerente de Petroecuador, Miguel Robalino, los datos de la Proforma confirman los escenarios que ya se habían advertido hace un año y, sin embargo, los planes de inversión de Petroecuador, que es responsable del 81% de la producción nacional, siguen estancados.

No se conoce el plan para 2024

El cierre del ITT no es la única explicación para que la meta de producción petrolera de Ecuador sea tan baja.

Además, está el retraso en los planes para sostener e incrementar la producción, que ya había caído 1% en 2023.

Por ejemplo, no se ha vuelto a licitar la reactivación de 100 pozos cerrados de la Amazonía, un plan que lleva paralizado 11 meses desde que el concurso se declaró desierto en marzo de 2023 por errores en el diseño del proceso.

La reactivación de esos podría inyectar 15.000 barriles diarios de petróleo.

Tampoco se han reactivado los concursos para licitar al campo de gas natural Amistad, ubicado en el Golfo de Guayaquil ni el aprovechamiento del gas que se quema en los mecheros de los pozos petroleros de la Amazonía. Y tampoco se han realizado nuevas rondas petroleras.

De hecho, sostener la producción ya de por sí se ha vuelto una tarea difícil. Según Plan General de Negocios, Expansión e Inversión de Petroecuador, los campos petroleros tienen una declinación natural de la producción del 27% en promedio anual.

Eso, debido al deterioro natural de las características productivas de los pozos, como reducción de gas o agua, lo que reduce su productividad.

Según, el grupo Transformación Energética, que reúne a expertos petroleros y energéticos, si bien la recuperación de pozos es importante, ya que puede paliar en algo la crisis, la solución estructural es hacer exploración para incorporar nuevas reservas, pero no hay avances.

"Cómo va a tener el país más reservas si no hay exploración. La producción petrolera se está cayendo porque tienen ya 40 o 50 años de producción. Hacen pozos en campos viejos y así no se agregan reservas; al contrario, se están drenando más rápido las reservas actuales", apunta Transformación Energética ante una consulta de PRIMICIAS.

Es una tarea difícil, considerando que el desarrollo de un pozo exploratorio puede tomar cinco años, considerando que requiere de estudios de sísmica, ambientales, entre otros, añade el grupo.

¿Ingresos sobrestimados?

El Ministerio de Finanzas explicó en una rueda de prensa del 21 de febrero de 2024, que las exportaciones de petróleo generarán USD 14.340 millones este año en ingresos para el país.

Sin embargo, de esos ingresos petroleros hay que pagar los costos de producción de Petroecuador, pagar las tarifas a empresas privadas, transferir asignaciones a gobiernos seccionales y costear los subsidios a los combustibles.

Por eso, luego de descontar todos esos rubros, solo entran a la caja fiscal USD 1.338 millones por ingresos petroleros.

Son solo USD 75 millones menos que en 2023, pese a que la producción petrolera, como se explicó antes, caerá 10% en 2024.

Es decir, es una cifra casi similar a la de 2023, cuando el Estado percibió USD 1.413 millones por ingresos petroleros.

De ahí que para el secretario del Observatorio de la Política Fiscal, Jaime Carrera, no queda claro de dónde sale la proyección de ingresos petroleros para 2024, considerando que el ITT ya no estará en producción el último cuatrimestre del año.

Además, Carrera cuestiona que en la Proforma de 2024 no se haya publicado, como solía hacer el Ministerio de Finanzas, el detalle de los costos de producción de Petroecuador, del gasto en la compra de combustible, del pago de las tarifas a las petroleras privadas, que también se cubre con ingresos petroleros.

Por otro lado, el Ministerio de Finanzas fue menos conservador este año y elaboró la Proforma presupuestaria de 2024, con un precio del petróleo más alto, de USD 66,7 por barril, cuando el año pasado lo hizo considerando un precio de USD 64,8 por barril.

Debido a los efectos del cierre del ITT, el presidente Daniel Noboa había anunciado que analiza una salida legal para aplazar el abandono del bloque.

Hay que considerar que la caída en los ingresos petroleros se profundizará en 2025, cuando ya no habrá la producción del ITT.

Las salidas frente a ese escenario van desde pedir a la Corte Constitucional una prórroga en el plazo, hasta lanzar una nueva pregunta a la ciudadanía para lograr más tiempo antes del cierre del campo.