La Ecuafútbol aplicó un (no tan) sorpresivo golpe de timón en la Tricolor Sub 20: despidió al entrenador Jimmy Brand y le entregó el equipo a Miguel Bravo, DT de Independiente Juniors, filial de IDV. ¡A tres meses del Mundial!
Se veía venir el despido de Bran, pero de todos modos quedó el incómodo sabor de la injusticia. Es verdad que el volumen de juego de la Selección no fue el esperado durante el Sudamericano Sub 20, pero se logró el objetivo principal de clasificarse al Mundial.
Bran no convenció
Bran hizo lo que pudo. No contó con todos los valores que juegan en Europa. Le faltó más tiempo de trabajo. Y era una arbitraria pretensión esperar que se repitiera el título del anterior torneo. Ecuador, finalmente, ocupó el puesto que dictaba la lógica: detrás de Brasil, Uruguay y Colombia. Por encima del resto.
Fue una evidente anormal que Argentina haya quedado fuera del hexagonal final y eso, sin duda, ayudó a Ecuador. Pero el equipo de Bran, sin lucirse, hizo lo justo. Y, en teoría, el entrenador Bran se ganó el derecho de dirigir en el Mundial de Indonesia.
La dirigencia no quedó satisfecha con Bran, no solo por el nivel deportivo sino también por los reportes de que el plantel estaba incómodo e incluso altanero. Ante el peligro de realizar un Mundial poco decoroso, la decisión, inédita en nuestra historia, fue cambiar al entrenador que logró la clasificación.
Es positivo que el nuevo timonel sea ecuatoriano y eso alivia en algo las tensiones. Pero elegir a Miguel Bravo no ha caído bien en una parte del fútbol, porque queda la sensación de que la Ecuafútbol se inclina por la escuela de Independiente del Valle.
No estoy hablando del puro estilo, sino de la máquina de formar, promocionar y vender jugadores. Y nada mejor para esa cadena de producción que la vitrina de un Mundial.
La sombra de Independiente
Las credenciales de Bravo son, sin exagerar, excelentes y prometedoras. Está llamado a dirigir a un grande del Ecuador en el futuro. Pero está alineado a IDV y se teme que el equipo de todos se convierta en la Selección Independiente de Fútbol.
Por otro lado, quizás todo esto sea lo más natural. Independiente lleva la delantera en la formación de jugadores. Liga Deportiva Universitaria aparece en su retrovisor. En cambio, los equipos importantes de la Costa han descuidado sus divisiones inferiores.
Pero hay algo más. Es innegable la influencia que ha alcanzado Independiente en la Ecuafútbol. Basta este ejemplo: en su libro sobre las eliminatorias, Gustavo Alfaro hizo una revelación sobre su proceso de contratación como DT de Ecuador.
En la página 21, Alfaro explica que, luego de su primera charla formal con Francisco Egas, presidente de la Federación, debió hablar de fútbol con dos evaluadores.
Ambos eran, según Alfaro, scouting de Independiente del Valle. Así que, en realidad, hace rato que la Tricolor juega con los colores azul y negro debajo de la amarilla de todos.
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