Jueves, 25 de abril de 2024

La política tiene poco espacio en el discurso del primer mandatario ecuatoriano

Autor:

Ana Angulo

Actualizada:

25 May 2019 - 0:06

Autor: Ana Angulo

Actualizada:

25 May 2019 - 0:06

Con un nuevo llamado a un gran acuerdo nacional finalizó el segundo Informe a la Nación del presidente, Lenín Moreno, ante el Pleno de la Asamblea, este 24 de mayo de 2019. El mensaje privilegió el tema económico y fue un recuento de las tareas ejecutadas por el Gobierno central.

“Es el momento de plantar las bases de un gran acuerdo en el que trabajadores, empresarios, comunidades, autoridades seccionales, funciones del Estado y gobierno pactemos los términos -inamovibles- de un convenio de unidad por el trabajo, la producción y la prosperidad”, dijo el presidente casi al finalizar la hora y media de Informe a la Nación.

En su mensaje, Moreno privilegió el tema económico al político, pues las tres cuartas partes dedicó a resaltar los "logros" de su administración. Mencionó cifras gruesas como la reducción del déficit fiscal de USD 8.000 a USD 3.500 millones e hizo algunos anuncios económicos como la eliminación del llamado “impuesto verde”. Esa fue, en el fondo, la única novedad del Informe de gestión tras dos años en el poder.

Aunque reconoció que la situación del país todavía es difícil, Moreno es optimista y confía en atraer recursos. Formuló una invitación a los inversionistas nacionales y extranjeros a traer sus capitales al país luego de que se ha puesto la casa en orden. “Debimos tomar decisiones complejas y delicadas, postergadas por la inclinación al populismo”, dijo en alusión al gobierno de su antecesor y mentor, Rafael Correa.

Después de dos años, la figura del exmandatario y excompañero de partido de Moreno sigue gravitando en el discurso presidencial. Aunque no lo mencionó con nombre y apellido ni una sola vez hizo varias alusiones a la década pasada.

En lo político

Además de llamar al acuerdo nacional, felicitó el acuerdo legislativo de mayoría que permitió a su partido, Alianza PAIS continuar al mando de la Asamblea Nacional con la elección de su coideario, César Litardo, como presidente de ese organismo.

Además de PAIS y sus aliados, el acuerdo se logró con el apoyo de CREO, movimiento del excandidato presidencial Guillermo Lasso, con las bancadas de Suma, Bloque de Integración Nacional (BIN) y de Acción Democrática (Badi). “El diálogo estableció consensos que ahora debemos perfeccionar”, manifestó complacido.

La política internacional

Ocupó una breve parte del discurso. Anunció que denunciará al tratado de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), que fuera impulsado por el difunto expresidente venezolano Hugo Chávez, y del cual en la práctica se ha retirado el país.

Asimismo cuestionó al régimen del actual presidente del país caribeño, Nicolás Maduro, de quien dijo que niega información a Ecuador por lo que no se puede verificar los antecedentes de los ciudadanos venezolanos que ingresan a territorio nacional.

La denuncia del Tratado de Unasur, que debe ser tramitada por la Asamblea, permitirá, dijo el mandatario, revisar la Ley de Movilidad Humana y establecer una visa humanitaria para los ciudadanos venezolanos, con lo que se facilitará una migración ordenada y segura, dijo.

“Uno de nuestros mayores retos es contribuir a la solución de la crisis en Venezuela, que se ha convertido (...)en una fuente de inestabilidad para varios países de la región”.

Moreno destacó que Ecuador de hoy presenta un nuevo rostro al mundo. "Promovemos intensamente nuestra oferta exportable, las inversiones, y el turismo", dijo. E insistió que el gobierno impulsa relaciones internacionales basadas en la búsqueda del bienestar común y no en afinidades ideológicas.

Moreno finalizó su discurso con una arenga a la unidad: "A la mitad de mi mandato, libres de mezquindades y vanidades políticas, respetuosos de las divergencias y las diversidades, pero unidos en la misma meta: vamos juntos, por un Ecuador con trabajo para todos".

El presidente habló ante un salón lleno. En la parte baja estuvieron las autoridades, incluyendo a los titulares de las entidades de control, ministros, cuerpo diplomático acreditado en el país e invitados especiales.

Las barras altas fueron ocupadas por simpatizantes del Gobierno, muchos de los cuales habían llegado desde el interior del país.