Del 9 al 12 de febrero, las fuertes lluvias y la marea alta en la cuenca del Guayas podría 'colapsar los sistemas de drenajes', advierte el Inocar.
Guayaquil no solo se enfrenta a fuertes precipitaciones y tormentas eléctricas, como lo pronosticó el Inamhi y que ya han causado severas inundaciones. Para el feriado de Carnaval, hay otra advertencia, puesto que la ciudad soportará una fase de aguaje máximo.
Según la reciente advertencia del Instituto Oceanográfico y Antártico de la Armada (Inocar), entre el 9 y 12 de febrero, habrá un período de 'sicigia' o aguaje máximo, que unido a las lluvias en la cuenca alta y media del río Guayas, podría aumentar los niveles de marea.
Este fenómeno provocaría otros daños graves, alerta el Inocar, puesto que los sistemas de drenaje en la ciudad podrían colapsar.
"Estas condiciones podría influir en la parte alta del Estero Salado, principalmente en las zonas más vulnerables de la ciudad", señala el Instituto.
En efecto, a lo largo de las deforestadas riberas del Estero, existen miles de asentamientos irregulares y de escasos recursos, que sufrirían inundaciones bajo los pronósticos actuales.
Tras las pasadas lluvias de la madrugada del 9 de febrero, Guayaquil ya reportó anegaciones en 41 avenidas y sectores principales, como Urdesa, norte de la ciudad, donde nuevamente los autos circularon en medio de enormes piscinas formadas en las calles.
Por otra parte, las presentes precipitaciones son atribuidas el fenómeno de El Niño, y ya causan daños en siete provincias de la Costa y la Sierra.
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