Arcsa aseguró que la investigación sobre presunta contaminación con plomo en la leche "aún es inconclusa". Y la industria láctea rechazó la difusión de los resultados preliminares.
Tras encontrar plomo en canela, embutidos, y hasta en salsas de tomate, ahora fue el turno de la supuesta contaminación de muestras de leche con este metal pesado en varias fábricas de Ecuador.
Pero la alerta inicial no surgió de la Agencia de Regulación y Control Sanitario (Arcsa), sino más bien del estudio de una universidad ecuatoriana, que luego se divulgó en redes sociales.
¿Qué dicen el Arcsa al respecto y los productores de leche? Tanto el sector industrial lácteo como la Arcsa se pronunciaron tras la difusión de los resultados preliminares de este estudio.
Estas son las posturas del Arcsa y los productores, y esto es lo que debería conocer sobre el estudio en cuestión:
¿Qué dice la investigación en muestras de leche?
Se trata de una investigación de la Escuela Politécnica Nacional, que inició hace unos dos años con el objetivo cuantificar los contenidos de aluminio y plomo en leches de tres ciudades de Ecuador: Quito, Guayaquil y Cuenca.
Las muestras de leche, en fundas de material flexible y en cartón multicapa, fueron adquiridas en centros comerciales de esas tres ciudades y enviadas a los laboratorios de la universidad para su análisis.
"Variaciones importantes se observaron en las concentraciones de aluminio y plomo entre las ciudades, siendo significativamente altas en Cuenca, incluso sobre los límites máximos recomendados en el caso de plomo", asegura un resumen de la investigación publicado en una revista.
Arcsa: Investigación aún es inconclusa
La Agencia de Regulación y Control Sanitario (Arcsa) aseguró en un comunicado que la investigación de la Escuela Politécnica Nacional aún es inconclusa.
La Escuela Politécnica Nacional informó al Arcsa que los resultados de la investigación serán confirmados y publicados en tres meses.
La Agencia asegura que, tras la publicación de los resultados preliminares, tuvo un "acercamiento inmediato" con la universidad y "conoció pormenores de sus estudios".
La postura del sector lácteo
Mientras, los industriales del sector lácteo expresaron su rechazo a las publicaciones sobre el estudio de este centro académico.
El 21 de marzo, el Centro de la Industria Láctea del Ecuador y la Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos y Bebidas (Anfab), que agrupan a 14 de las industrias lácteas formales del país, difundieron un comunicado al respecto.
"Preocupa mucho que desde instituciones muy respetables se enciendan alarmas por supuestos resultados que no cuentan con el análisis de laboratorios avalados por el Servicio de Acreditación Ecuatoriano (SAE) ni de la Arcsa", señaló el presidente ejecutivo de Anfab, Christian Wahli.
La directora ejecutiva del Centro de la Industria Lácrea, Verónica Chávez Man-Ging, agregó que
"es urgente que las autoridades competentes vigilen la información inconclusa que llega a la ciudadanía".
"Al parecer, hoy en día resulta fácil dañar la reputación de un sector productivo, invalidando los controles permanentes que se hacen a los alimentos producidos en el sector formal", añadió.
Este sector productivo también pidió a las autoridades que hagan "todos los esfuerzos para controlar al sector informal", que no cumple con garantías mínimas de calidad.
Las empresas lácteas asociadas en el CIL y Anfab se comprometen a "prestar todas las facilidades" a las entidades gubernamentales que requieran implementar análisis de calidad a sus productos, de manera que en adelante se cuente con "información oficial y transparente que mitigue las dudas que hoy en día se han generado en los consumidores".
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