Sábado, 27 de abril de 2024

IESS: Envejecimiento de la población disparará gastos; Peña plantea subir aportes

Autor:

Patricia González

Actualizada:

3 Mar 2024 - 8:24

El presidente del Consejo Directivo del IESS, Eduardo Peña, plantea incrementar la tasa de aportación de 20,6% a 30%, de manera lenta y progresiva.

Un paciente adulto mayor recibe la visita de autoridades del Hospital General Portoviejo, del IESS, el 27 de febrero de 2024.

Autor: Patricia González

Actualizada:

3 Mar 2024 - 8:24

Un paciente adulto mayor recibe la visita de autoridades del Hospital General Portoviejo, del IESS, el 27 de febrero de 2024. - Foto: Dirección Provincial de Manabí del IESS / X.

El presidente del Consejo Directivo del IESS, Eduardo Peña, plantea incrementar la tasa de aportación de 20,6% a 30%, de manera lenta y progresiva.

El Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) alista las medidas necesarias para hacer frente al rápido envejecimiento que tendrá la población ecuatoriana para los próximos 20 o 30 años.

Una de las medidas que se plantea la entidad es el incremento del aporte al IESS, por parte de afiliados activos y empleadores. Actualmente, ese aporte es de 20,6%, de los cuales 9,45% corresponde al trabajador bajo relación de dependencia y 11,15% al patrono.

El presidente del Consejo Directivo del IESS, Eduardo Peña, señaló en una entrevista en el canal Teleamazonas, el 29 de febrero, que ese aporte debería subir al menos a 30%, de forma lenta y progresiva.

Esa alza permitiría aumentar las tasas de aportación para los seguros de Pensiones y Salud, que son los que presentan mayores problemas de financiamiento.

Otra medida a la que ha hecho referencia Peña en varias ocasiones es modificar la base de cálculo de la pensión, que actualmente corresponde a los cinco mejores años de sueldos. Según Peña, deberían incluirse los 30 años de aportación al IESS.

Más adultos mayores y pensionistas

Para 2040, la población igual o mayor a 60 años llegará a 1,9 millones en Ecuador, lo que significa que habrá aumentado en 85% con relación a la que había en 2022.

Y para 2050 ya habrá superado los 2,6 millones de personas, según las proyecciones del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

Ese acelerado crecimiento de la población de mayor edad tendrá un fuerte impacto en los gastos futuros del IESS, una entidad a la que actualmente no le alcanzan sus ingresos para pagar las pensiones a sus jubilados y otros rubros.

Cerca del 60% de las personas de 60 años y mayor edad en el país son pensionistas del IESS. En 2023, el Seguro Social cerró con 660.000 pensionistas y para este año, la entidad prevé superar los 700.000 pensionistas. La mayor parte corresponde a jubilados por vejez.

Según el Informe de Recomendaciones de la Comisión Interdisciplinaria de Reforma al Sistema de Pensiones (agosto, 2023), creada por solicitud del Gobierno anterior, entre 2022 y 2050, el número de jubilados del IESS se expandirá a un ritmo de 4,1% por año, mientras que el número de trabajadores activos que aporta al IESS crecerá apenas 1,1% anual.

Esa diferencia en el ritmo de crecimiento entre afiliados y aportantes viene de años atrás, lo que está afectando la sostenibilidad del IESS.

Un sistema de pensiones es saludable cuando, al menos, ocho trabajadores activos aportantes al IESS financian un jubilado. A comienzos de los años 2000, había 10 aportantes por cada jubilado, pero en el presente hay cinco aportantes por cada jubilado. Y para 2050, la relación será de 2 a 1, dice el documento.

Gastos al alza

Como consecuencia de lo anterior, el déficit entre ingresos por aportes y gastos por pago de jubilaciones irá aumentando cada vez más, llegando a representar el 12% del Producto Interno Bruto (PIB) de Ecuador para 2050, según las proyecciones de la Comisión.

Hoy mismo ya se observa la crisis de liquidez del IESS. Así, el instituto presupuestó para 2024 un gasto en pensiones de USD 6.578 millones, alrededor de USD 800 millones más que en 2023.

Mientras que los ingresos por aportes de afiliados y empleadores serán de apenas USD 3.281 millones. Es decir, al IESS le harán falta USD 3.296 millones en 2024 para cubrir las pensiones de los jubilados.

Por ley, el Estado debe aportar con el 40% para el pago de las pensiones. Sin embargo, la Comisión cree que ese aporte tampoco será suficiente para financiar el déficit entre ingresos y gastos del Seguro de Pensiones.

De hecho, los atrasos del Estado en esa contribución y diferencias con el IESS en cuanto al monto, obligan a la entidad a echar mano de sus ahorros del fondo de pensiones administrado por el Banco del IESS (Biess).

Para este año, el IESS pidió USD 3.706 millones a Finanzas para cubrir el pago de pensiones, pero el Ministerio de Finanzas solo le dará USD 2.393 millones.

De ahí que, el IESS presupuestó una desinversión por USD 1.408 millones del Biess, con ello no solo bajarán las reservas que servirán para pagar las pensiones futuras, sino que el banco tendrá menos dinero para otorgar préstamos a sus afiliados.

Más gastos en salud

El aumento acelerado de la población de adultos mayores no solo presionará los gastos en pensiones, también incrementará los beneficiarios y el número de atenciones para el Seguro de Salud, actualmente afectado por falta de medicamentos.

En el caso de los jubilados y las personas con enfermedades catastróficas, la Ley de Seguridad Social determina que el Estado debe contribuir para cubrir sus atenciones médicas.

Sin embargo, a la fecha adeuda USD 4.800 millones (monto auditado) por el incumplimiento de esa contribución por años. La deuda con el Seguro de Salud comenzó a pagarse recién en 2022.

De igual manera, el envejecimiento de la población impactará en los gastos para el sector Salud del Estado, que en este año representarán USD 4.491 millones, según la Proforma 2024.

Y también en subsidios del Estado, siendo los adultos mayores parte de los beneficiarios. Para la pensión 'Mis Mejores Años', la Proforma 2024 asignó un presupuesto de USD 345,9 millones.

Esa pensión consiste en una transferencia mensual de USD 100 para personas mayores de 65 años en condiciones de pobreza y que no tienen cobertura de seguridad social.