Viernes, 26 de abril de 2024

Se duplica la venta de libros digitales en el mercado ecuatoriano

Autor:

Gabriela Coba

Actualizada:

4 Sep 2021 - 0:03

Las restricciones para evitar contagios de Covid-19 y la pérdida de ingresos han modificado los hábitos de lectura de los ecuatorianos, lo que repercute en el sector editorial.

Imagen referencial. Una persona sostiene una tablet en donde lee un libro digital.

Autor: Gabriela Coba

Actualizada:

4 Sep 2021 - 0:03

Imagen referencial. Una persona sostiene una tablet en donde lee un libro digital. - Foto: Pixabay

Las restricciones para evitar contagios de Covid-19 y la pérdida de ingresos han modificado los hábitos de lectura de los ecuatorianos, lo que repercute en el sector editorial.

Las ventas de e-books o libros digitales en Ecuador han experimentado, durante la pandemia un alza de 90% en monto, según el informe anual del Libro Digital, elaborado por Libranda, principal distribuidora de contenido digital editorial en español del mundo.

Si el cálculo se hace en función del número de libros vendidos, el crecimiento es de 135%, sostiene el reporte.

Ese fenómeno se debe a una serie de factores, entre ellos:

  • Restricciones de movilidad y distanciamiento para evitar contagios de Covid-19.
  • Reducción del poder adquisitivo de los hogares.
  • Mayor publicación de textos en formato digital.

El confinamiento que se inició a inicios de 2020 imposibilitó las compras presenciales, por lo que las personas recurrieron a los textos digitales, explica Vicente Velásquez, de Asociación Ecuatoriana de Editores de Libros de Texto y gerente de la editorial Edinum.

En ese contexto, la industria editorial ecuatoriana también reaccionó y creó plataformas para la venta de libros digitales a través de códigos, sostiene Velásquez.

Agrega que para recuperar las ventas el sector también ha habilitado los envíos a domicilio de libros impresos. Aunque eso solo representa el 5% de las ventas, ya que en la cultura ecuatoriana se mantienen las compras en tienda.

El poder del precio

Otro factor que ha incentivado una mayor compra de libros digitales es su precio, sostiene Libranda.

Por la pérdida de poder adquisitivo las personas han optado por adquirir un libro digital, cuyo precio promedio en Ecuador es USD 8,68, lo que equivale a menos de la mitad del precio de un libro físico, según el reporte.

Velásquez explica que eso ocurre con los libros de interés general, porque sus costos se elevan cuando los títulos se imprimen en cantidades bajas. "Ante esa realidad el autor busca una alternativa y se dedica a escribir libros digitales", sostiene.

La categoría de libros de interés general abarca novelas, cuentos, poesía, recetarios de cocina, entre otros.

Por eso la participación de títulos digitales en el país ha elevado, al pasar de representar el 22,32%, en 2019; al 49,53% en 2020.

Baja lectura escolar

El buen desempeño de los libros digitales se ha evidenciado en los textos de interés general, aclara Velásquez, quien agrega que la realidad de los textos educativos es otra. En ese segmento se evidencia una baja, tanto en libros físicos y digitales, por la contracción de los ingresos de los hogares, por la crisis.

"Como la economía de las familias está golpeada muchos colegios no piden libros".

Vicente Velásquez, Edinum

"Los pocos colegios que siguen pidiendo libros han reducido el número, de nueve a dos textos. Se mantienen los libros de lenguaje y matemáticas", afirma el experto.

Formatos que conviven

Para el sector editorial de Ecuador esta mayor presencia de libros digitales no significa la desaparición de los impresos, sino una convivencia entre los dos formatos.

Se espera que eso se mantenga, sobre todo, en el caso del texto escolar, ya que en el país no todos los hogares tienen acceso a Internet o a dispositivos tecnológicos. Solo el 45,5% de hogares en Ecuador tiene acceso a Internet, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

En el caso de los libros de interés general la migración hacia lo digital será mayor, afirma Velásquez. El sector estima que en tres años sus ventas llegarán a niveles previos a la pandemia.