Para Fernando Botero no valía el calificativo de 'gordo' en sus figuras. El colombiano se proclamaba un defensor del volumen en el arte contemporáneo.
El pintor y escultor colombiano de las figuras voluptuosas, Fernando Botero, fallecido este viernes a los 91 años, era uno de los artistas de América Latina más reconocidos en el mundo.
A lo largo de su excepcional carrera, defendió el arte de la generosidad a través de sus obras.
"Pienso con frecuencia en la muerte y me da lástima irme de este mundo y no poder trabajar más, porque tengo un gran placer trabajando", dijo a la AFP durante una entrevista cuando cumplió 80 años.
Botero nació el 19 de abril de 1932 en Medellín, Colombia. Hijo de un modesto agente de comercio, se inició en el arte tempranamente y contra la opinión de su familia. A los 15 años, vendía dibujos sobre temas de tauromaquia a las puertas de la plaza de toros La Macarena.
"Cuando yo empecé, esta era una profesión exótica en Colombia, no era aceptada ni tenía ninguna perspectiva. Cuando le dije a mi familia que me iba a dedicar a la pintura, respondieron: 'Bueno, está bien, pero no le podemos dar apoyo'. Lo hice igualmente y afortunadamente"
Fernando Botero
Tras una primera exposición en Bogotá en los años 1950, partió a Europa, pasando por España, Francia e Italia, donde descubrió el arte clásico. En su obra también influyó el arte mural de México, donde se instalaría posteriormente.
¿Cómo nació el estilo Botero?
Las desbordadas formas de su arte, su marca registrada, habían aparecido como una revelación en 1957, con la pieza "Naturaleza muerta con mandolina".
Estaba en un parque, dibujando una mandolina. Por casualidad, hizo un agujero demasiado pequeño para ese instrumento y de golpe, "entre el pequeño detalle y la generosidad del trazo exterior, se creó una nueva dimensión que era como más volumétrica, más monumental, más extravagante", explicó.
A los medios colombianos aseguró que su talento fue haberse dado cuenta que algo había pasado en ese momento. A partir de ahí empezó a interesarse por el volumen.
Con Botero no valía el calificativo de "gordo" para sus figuras. Enamorado del renacimiento italiano, se proclamaba ante todo "defensor del volumen" en el arte moderno.
Su escultura, marcada también por el gigantismo, ocupó un espacio muy importante en su carrera, desarrollada en buena parte en Pietrasanta (Toscana, Italia).
Fue en los años 1970 cuando su carrera despegó, tras conocer al director del museo alemán de Nueva York, Dietrich Malov, con quien organizó exitosas exposiciones.
Su legado, que incluye más de 3.000 pinturas y 300 esculturas, está pautado por su insaciable sed creativa. En los últimos años, en una carrera febril, trabajaba 10 horas diarias. La sola idea de dejar los pinceles "me aterra más que la muerte", decía.
Algunas de sus esculturas más famosas
Muchas obras de Botero engalanan parques y plazas, pues el artista reivindicó las exposiciones al aire libre como un "acercamiento revolucionario" del arte con su público.
Una idea que estrenó en 1992 en París, con una muestra en los Campos Elíseos, y que luego llevó al gran canal de Venecia y frente a las pirámides de Egipto. Sus personajes de inmensas curvas también desembarcaron en 2015 en China, un sueño cumplido, según comentó.
Estas son algunas de sus esculturas más famosas, que hacen alusión a la belleza.
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'Torso de mujer'
Conocida mundialmente como 'La gorda de Botero', esta obra es una de las más icónicas de su producción artística. Se encuentra en Medellín, su ciudad natal; mide 2,48 metros de alto y pesa 1.250 kilos.
"Pero sí sé que su pintura apuesta a favor de un renacimiento, libera la expresión estética de cualquier tipo de coacción académica, y que el universo desorbitado de sus figuras abre una nueva frontera a la contemplación de lo sublime. pic.twitter.com/KqStwPhKBZ
— Museo de Antioquia (@museodantioquia) April 19, 2020
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'El Caballo'
Representa al Caballo de Troya, es una de las obras más representativas de Botero. Se encuentra frente al Museo de Arte Contemporáneo (MAC) en el Parque Forestal, en Santiago de Chile.
El caballo de Botero en pleno parque forestal #santiago #chile https://t.co/UcF4RfKQJt pic.twitter.com/ow1tNbfnNA
— Dario Ramirez (@DarioSays) February 18, 2017
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'Mujer con espejo'
Obra 'Mujer con espejo', de Fernando Botero, en Madrid. @ArtNow_
Creada en 1987, es una de las cuatro esculturas de Botero que se hay en España. Se encuentra en Madrid, en la plaza de Colón.
El artista regaló la escultura a la capital española al ver la gran acogida que tuvieron sus "gordas" durante los tres meses que duró la exposición 'Botero en Madrid', en 1924.
Su producción en pinturas también es abundante. Botero, que decía que nunca sabía qué pintaría al día siguiente, se inspiró en la belleza, pero también en los tormentos de su país, afectado por un conflicto armado de más de medio siglo. Así, su obra muestra escenas de guerrillas, atentados y matanzas.
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'Mona Lisa a los 12 años'
Una obra que demuestra claramente el estilo transgresor del artista colombiano. La pintó en 1978 y es una reinterpretación de La Gioconda, de Leonardo Da Vinci.
Aunque el artista mantuvo detalles de la obra original como la posición de las manos, la mirada y la sonrisa, incorporó nuevos elementos en el fondo como el volcán y las montañas.
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'La muerte de Pablo Escobar'
Fernando Botero también pintó al narcotraficante más poderoso de Colombia y lo hizo en dos ocasiones: 'La muerte de Pablo Escobar" (1999) y Pablo Escobar muerto" (2006).
“La muerte de Pablo Escobar” de Fernando Botero. DEP pic.twitter.com/gkH69uOr0B
— osiris (@poetrycharro) September 15, 2023
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'Pareja bailando'
Esta obra de 1987 muestra a una voluptuosa pareja bailando en un salón decorado con cintas con los colores de la bandera colombiana y un espejo que insinúa la profundidad del espacio.
🎼Cite este trino con la canción o banda sonora que creen acompañaría a esta 'Pareja bailando' de Fernando Botero.
¿Quién se apunta? pic.twitter.com/JkdpohFx4y
— Banrepcultural (@Banrepcultural) April 19, 2021
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