El ministro del Ambiente, Agua y Transición Ecológica, Gustavo Manrique, dice que acelerarán la aprobación de las licencias ambientales, puesto que esto representa inversiones al país.
El pasado 5 de junio, mediante decreto ejecutivo, el Ministerio del Ambiente y Agua cambió de nombre. Ahora se llamará Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica.
En entrevista con PRIMICIAS, el ministro Gustavo Manrique explica qué acciones se van a desarrollar para lograr la transición ecológica que propone el Gobierno y cuáles son las prioridades de esta cartera de Estado.
¿Qué es la transición ecológica?
Hemos decidido iniciar un proceso de cambio radical, profundo y progresivo en materia ambiental.
Por ejemplo, las carteras de Estado tienen que trabajar de la mano para ya no solo preocuparse, como el Ministerio de Vivienda de dar una vivienda para un ciudadano o una población determinada, sino una vivienda que tenga ciertas credenciales ecológicas.
Simplemente la implantación de una casa para que entre luz natural y evite prender luces la mayoría del tiempo ya es una transición ecológica.
Existe un ejemplo con cada una de las carteras de Estado, que permite una claridad de la transversalidad y la profundidad que el país ha decidido.
¿Cómo se va a llegar a la transición ecológica?
Partimos de un decreto presidencial, luego vienen acuerdos ministeriales y luego lo que se vaya permeando de lo que sea necesario.
¿Hay recursos para hacerlo?
En el decreto presidencial dice que no podemos incrementar el gasto del Ministerio del Ambiente, y esa es una instrucción máxima.
Pero, la vida me ha enseñado que hay muchas cosas en las que no se necesitan recursos económicos para cambiar, sino voluntad política y eso tienen todas las Carteras del Estado.
Hay muchas actividades que no necesitan recursos económicos para implementar la transición ecológica, de hecho en la mayoría.
¿Cuáles serán las otras prioridades del Ministerio?
Hay dos grandes prioridades en esta etapa. La primera es destrabar toda la tramitología que ha tenido frenada la inversión en el país. El Ministerio del Ambiente es la primera parada de un inversionista para poner la primera piedra de su obra o inversión.
Sin la licencia ambiental no existe inversión, no se puede.
Hay más de 20.000 licencias ambientales o trámites represados de inversión en el Ministerio.
La segunda arista es trabajar en la conservación, en la biodiversidad, en convertir el Ecuador en el lugar que provee servicios ambientales.
Galápagos necesita del turismo, pero también conservación, ¿cómo llegar a un equilibrio?
Hay tres ejes que tenemos que cuidar con el tema de Galápagos.
- Los intereses de los pescadores.
- El cuidado medioambiental, prácticas adecuadas.
- Si existe impacto, revisar qué pasa con el eje social, aquellas industrias que se ven afectadas.
Un grupo de niños en las Islas Galápagos, el 8 de abril de 2021. Parque Nacional Galápagos
¿Qué acciones se van a tomar frente a las flotas marítimas extranjeras?
Se ha creado un comité conformado por Cancillería, Ministerio de Defensa, Ministerio de la Producción, Ministerio del Ambiente y Secretaría de Comunicación.
Hay una ligera desinformación. Tenemos un Ecuador continental y 200 millas de mar (zona económica); y el Archipiélago con 200 millas de mar (40 de protección).
En el medio hay un corredor de mar internacional y ahí pueden venir a pescar de todos los países, en la medida que tengan sus permisos.
¿Dónde está el problema? El problema está cuando se meten en cualquiera de las dos zonas de mar ecuatorial.
No puedo garantizar que no se van a meter los barcos, pero puedo garantizar que el Gobierno está trabajando con toda la tecnología, aérea y marítima, desde el Ministerio de Defensa para evitar que un barco, o varios, entren a la zona del mar ecuatorial.
La erosión del Río Coca se deriva de la construcción de la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, ¿qué hace el Ministerio al respecto y qué hará para evitar riesgos a causa de estas megaobras?
No estaría tan seguro de afirmar que es producto de Coca Codo Sinclair, están trabajando en eso. La naturaleza es inclemente.
Efectivamente, hace poco hubo un socavamiento de 1,6 kilómetros. El 21 de mayo pasamos de alerta naranja a alerta roja y desde el Ministerio nos compete lo relacionado con agua y saneamiento.
Y, también hay un comité interministerial, nosotros estamos trabajando de cara a garantizar el acceso al agua y potencial movilización de las 50 familias de la comunidad.
¿Cómo reparar los problemas ambientales que ha traído la erosión del río Coca?
La reparación ambiental hasta ahora no hay. Pero, si se refiere a que el río está cambiado de curso o que se hace más ancho o más angosto, son procesos naturales.
Por eso me gustaría dejar con signo de interrogación a qué se debe el socavamiento y la erosión.
Un dron de Celec monitorea el fenómeno natural de erosión regresiva en las márgenes del río Coca, el 3 de febrero de 2021. Cortesía Celec
La minería está tomando fuerza en el país, ¿cuál es su posición sobre esta actividad?
El presidente Guillermo Lasso ha dicho que no será un promotor de la minería, pero la actividad podría ser una inversión importante que ayude a tener los ingresos que el país necesita.
Entonces se seguirá adelante con los procesos mineros que cumplan con todos los requisitos de los estándares más altos a escala mundial.
No soy fan de la minería, no podría ser un ministro del Ambiente y ser el precursor o promotor de la minería.
De hecho intentaré impulsar la conservación, pero hay claros reglamentos, normas y procesos para obtener una licencia.
Si a nosotros nos llegan las solicitudes con los planes de manejo ambientales adecuados, no queda otra opción que dar la licencia.
Seremos implacables en los controles para la minería.
¿Cómo se pretende diezmar el impacto de la producción petrolera?
Hay una diferencia entre producción y productividad, el Presidente habla de productividad, que es en el mismo sitio producir más. No es que tengo 10 empresas petroleras y ahora quiero 20.
Es importante mencionar que el inversionista, en este caso petrolero, tiene un plan de inversión. Esto tiene un estudio de impacto ambiental con diferentes capítulos bióticos, abióticos, sociales, inclusive los planos estructurales y demás.
Esos planes entran a revisión al Ministerio de Ambiente y eso arroja una biblia de la producción ambiental, que nosotros debemos controlar.
Además, tienen pólizas y garantías que si no cumplen hay que ejecutarlas.
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