Sábado, 27 de abril de 2024

Hace 15 años, José Francisco Cevallos fue las 'Manos de Liga'

Autor:

Martha Córdova

Actualizada:

2 Jul 2023 - 5:27

El 2 de julio de 2008, el arquero de Liga Deportiva Universitaria silenció el estadio Maracaná en la definición por penales con Fluminense. Ese día, la 'U' ganó 3-1 y levantó la Copa Libertadores.

José Francisco Cevallos Libertadores Liga

Autor: Martha Córdova

Actualizada:

2 Jul 2023 - 5:27

José Francisco Cevallos festeja uno de los penales atajados en la final de la Libertadores de 2008, en Río de Janeiro, el 2 de julio. - Foto: AFP

El 2 de julio de 2008, el arquero de Liga Deportiva Universitaria silenció el estadio Maracaná en la definición por penales con Fluminense. Ese día, la 'U' ganó 3-1 y levantó la Copa Libertadores.

Mostrarle a su nieto Luca, el video de la consagración de Liga de Quito en la Copa Libertadores de América de 2008, se ha vuelto una rutina casi semanal para José Francisco Cevallos.

'Pepe Pancho' fue el héroe en el Maracaná, la noche del 2 de julio de 2008, cuando Liga levantó el trofeo más importante del continente. "El título fue de todos, el resultado de un trabajo grupal", dice el exarquero.

Hace dos años nació Luca "y quiero que mi nieto conozca la historia de su abuelito, de mi paso por el fútbol. Le enseño el video de los penales y se pone contento", relata orgulloso y feliz de vivir esta nueva faceta de su vida, a los 52 años.

Un capítulo de esa historia son, a no dudarlo, los tres penales que atajó y que le valieron a la 'U' ganar esa definición, 3-1, ante un Maracaná repleto de hinchas de Fluminense.

"A nivel de clubes, este logro marcó un hito de que se podía conseguir esta clase de éxitos, cuando se trabaja de manera planificada. Liga mostró eso, una planificación seria. Los éxitos internacionales no fueron casualidad".

Cevallos llegó a Pomasqui cuando tenía 37 años y se encontró con un grupo de directivos, entrenadores y futbolistas con "hambre de gloria internacional, de lograr un éxito importante. El club creyó en mí, cuando estaba en el ocaso de mi carrera".

Le gustó el proyecto. El entrenador Edgardo Bauza le compartió el objetivo y se fijó en el grupo de jugadores.

"Venía de un proceso de varios años, al que se le hizo algunos retoques para hacerlo fuerte. Se creó un ambiente para buscar ese título internacional".

José Francisco Cevallos, exarquero

Antes de colocarse los guantes y el buzo con la 'U' en el corazón, para convertirse en las 'Manos de Liga', había que hablar con la hinchada y con Don Rodrigo Paz, el histórico dirigente que no lo quería en el plantel por su pasado en Barcelona.

"Yo me opuse a su contratación, pero el guagua (Esteban Paz), conjuntamente con el profesor (Edgardo Bauza), han decidido incorporarle. Tenga en mí a un hombre que lo va a apoyar sobremanera, lo único que aspiramos es que rinda. Usted es un gran arquero", le dijo don Rodrigo Paz a Cevallos en ese momento.

El profe Bauza estuvo presente en este diálogo directo entre el directivo y el exarquero. "Ahí marcamos una relación muy cercana que estuvo presente durante el tiempo que estuvimos juntos. Fue importante tener el respaldo de un hombre visionario y ganador como fue él. Una leyenda".

'Pancho' Cevallos sentía incertidumbre por la reacción de la hinchada de Liga a su contratación. Él estaba identificado con los colores de Barcelona. "Desde la presentación del plantel, la gente me aplaudió, me hicieron sentir como en casa y eso me motivó para dar lo mejor".

Con el ambiente propicio para demostrar los 18 años de experiencia que había sumado en Barcelona y Deportivo Azogues, en Ecuador y en Once Caldas, de Colombia, comenzó una de las etapas más importantes en su carrera profesional.

Con la camiseta de Liga de Quito, José Francisco Cevallos ganó los cuatro títulos internacionales que posee hoy el club 'albo': Copa Libertadores en 2008, Copa Sudamericana en 2009 y las Recopas en 2009 y 2010.

Y señala al entrenador Edgardo Bauza como uno de los responsables directos para esta etapa gloriosa. "Con nosotros fue un maestro, nos brindó confianza y apertura. Nos exigía para sacar nuestras fortalezas en beneficio del plantel. Nos guio al éxito".

Las tres atajadas históricas

Para José Francisco Cevallos, la forma cómo Liga de Quito se coronó campeón de la Copa Libertadores en 2008 hace mágica la consecución del título: en un estadio mítico, como el Maracaná.

"Con toda la hinchada en contra, con un empate en la serie, con tiempos de alargues y definición en penales".

Y en esa definición en penales ante el Fluminense, fue el gran protagonista. En cada lanzamiento fue hasta el fondo de las redes, se inclinaba y oraba.

"Invocaba a mi padre, al que perdí a los 11 años, pero desde el cielo estuvo presente en los momentos más difíciles. Él me apoyó".

José Francisco Cevallos, exarquero

Después de esos 10 o 15 segundos de espiritualidad, se ubicaba en el centro del arco a exhibir toda su experiencia. Su estrategia: desconcentrar al rival, hacerlo dudar y esperar hasta el último segundo para llevar a su oponente a rematar al lugar donde esperaba el balón.

"Hice la lógica. Los delanteros zurdos rematan a la derecha, y a la inversa", relata Cevallos. Así fue como atajó ese primer lanzamiento a Diego Conca.

Con Thiago Neves hubo un duelo de ansiedades. El delantero del Fluminense quiso meterle presión a Cevallos y demoró más de lo normal para tomar el remate. Cevallos jugó su carta, se salió de su portería y fue a reclamar al árbitro.

José Francisco Cevallos ataja el penal a Washington en la final de la Copa Libertadores 2008, el 2 de julio, en el estadio Maracaná.

José Francisco Cevallos ataja el penal a Washington en la final de la Copa Libertadores 2008, el 2 de julio, en el estadio Maracaná. Reuters

"La desconcentración en los penales ocurre en milésimas de segundo. Dudó y remató al centro del arco, pude desviar el balón con el pie".

El tercer penal que atajó fue a Washington, el destacado delantero de quien ningún seguidor del 'Flu' dudaba. Pero José Francisco Cevallos volvió a demostrar su jerarquía.

"Me sentía con tanta confianza, que sabía que le iba a atajar. Tenía el convencimiento que iba a rematar para el lado derecho, así que cuando le veía venir a la pelota, yo estaba pensando para dónde salir a celebrar".