Azuay: Pachakutik es la primera fuerza y el correísmo se desvanece

La fuerza correísta en el Austro cae a la mitad. Mientras que Pachakutik obtiene la mayoría de apoyos y dos curules para la Asamblea Nacional.

Después de dos periodos legislativos, Azuay tendrá nuevamente una representación multipartidista en el Legislativo. Sus cinco curules quedaron repartidos entre cuatro fuerzas políticas.

Pachakutik, que no había participado en las elecciones anteriores para la dignidad de asambleístas, renace llevándose dos escaños. Y el correísmo continúa con su tendencia a la baja.

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Bajo la bandera de Alianza PAIS esa fuerza política consiguió en 2013 quedarse con todas las curules de la provincia, pese a tener solo el 56% de respaldos. Pero desde entonces ha ido perdiéndolos. Y en las elecciones de febrero pasado obtuvo solo un escaño, bajo el auspicio de Centro Democrático.

Además de la pérdida de simpatizantes en el austro, por factores sociales, políticos y económicos, esto también sucede por el cambio en el método de adjudicación de escaños, que equilibra la repartición y da espacio a las minorías.

Por otra parte, la Izquierda Democrática y el movimiento local Azuay Primero se cuelan en el tablero político provincial.

Más allá de los escaños

Los resultados de estas elecciones legislativas, comparados con las de 2017, muestran el cambio radical en el panorama político azuayo, con cuatro hechos claros:

Pachakutik se ubica ahora como la primera fuerza política local.
El correísmo se derrumba y pierde la mitad de votación.
Las derechas también caen: el movimiento Creo pierde dos terceras partes de sus votantes y el PSC retrocede tres puntos.
Nuevas propuestas se abren paso: la Izquierda Democrática duplica sus respaldos.

También queda claro que la imagen del candidato presidencial de Pachakutik y el anterior prefecto azuayo, Yaku Pérez, tuvo acogida entre los votantes. Por ello, el movimiento indígena se alzó con sus mejores resultados en todas las dignidades.

Incluso tras las elecciones, Pachakutik se convirtió en la segunda fuerza política a nivel nacional.

Además, varias figuras del correísmo en el austro ya no están presentes en la agrupación o en el escenario político, tras el cisma con Alianza PAIS. Es el caso de José Serrano, Fernando Cordero y Rosana Alvarado.