Un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) detalla la efectividad de cada vacuna frente a las variantes de preocupación.
Desde la aparición del Covid-19, a finales de 2019, la ciencia se volcó a buscar una vacuna contra el virus.
Un año después, las primeras dosis ya se suministraban en el mundo, pero el virus por su naturaleza misma empezó a mutar.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) calificó a las nuevas variantes como de preocupación y de interés. Y les otorgó un nombre del alfabeto griego para no estigmatizar su país de origen.
Hasta el momento, y según datos del organismo, alfa es la mutación con más presencia en el mundo, se encuentra en 180 países. Pero, según las estimaciones delta será predominante en un futuro cercano.
La OMS, con los datos de farmacovigilancia obtenidos por las farmacéuticas y las entidades de control, elaboró un informe donde explica la efectividad de las distintas vacunas sobre las variantes del Covid-19.
De las cuatro denominadas como de preocupación, la más analizada es delta, pues los investigadores han concluido que es más contagiosa.
En Ecuador se confirmó que la variante circulaba desde finales de junio de 2021.
Expertos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), como Heriberto García Escorza, director del Instituto de Salud Pública de Chile, y Jairo Mendez-Rico, asesor de Enfermedades Virales, han dicho que “hasta el momento las vacunas que han sido aprobadas son eficientes contra todas las variantes”.
“Como son variantes más transmisibles, la eficacia de las vacunas para evitar los contagios puede disminuir. Pero no así la eficacia de evitar la hospitalización y la muerte porque es el mismo virus”.
Heriberto García Escorza
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