La relación con México es clave en seguridad y la migración. La firma de un acuerdo comercial con ese país facilitaría el ingreso de Ecuador a la Alianza del Pacífico.
El más reciente capítulo en la relación bilateral con México es de carácter comercial. Pero la relación con ese país es relevante para Ecuador también en aspectos migratorios y de seguridad.
El presidente Guillermo Lasso está a la espera de que el gobierno de su homólogo Andrés Manuel López Obrador firme el acuerdo comercial, que lleva casi cuatro años sobre la mesa de negociación.
Este acuerdo es la llave que Ecuador necesita para poder ingresar como miembro pleno a la Alianza del Pacífico.
Según el canciller Juan Carlos Holguín, hay una decisión unánime de los países del bloque comercial de invitar a Ecuador a la Cumbre de diciembre. "Sin embargo, si no tenemos nuestro acuerdo con México antes de noviembre, no asistiremos", dijo el titular de la diplomacia ecuatoriana.
Aunque los puntos "irritantes" del documento son tres de los productos estrella de Ecuador (camarón, banano y atún), el canciller Holguín aseguró que solo estaría pendiente encontrar un punto intermedio sobre el camarón.
Esto porque el presidente López Obrador dijo previamente que aún no había acuerdos sobre los tres productos, pese a que la novena ronda de negociación lleva más de cuatro meses.
Problemas compartidos
Un fuerte vínculo diplomático entre Quito y el Distrito Federal tiene sus orígenes en la problemática relacionada con la migración irregular. La mayoría de ecuatorianos que buscan llegar a Estados Unidos, lo hacen cruzando la frontera mexicana.
Los registros de ecuatorianos detenidos en la travesía, heridos en tránsito por las malas condiciones brindadas por los 'coyoteros' o muertos en el camino son constantes.
El Viceministerio de Movilidad Humana registra que, entre enero y agosto, 12.921 ecuatorianos han sido deportados desde la frontera mexicana y de ellos cerca de 3.000 son menores de edad.
Las consecuencias sociales y económicas de la pandemia agravaron la crisis migratoria de ecuatorianos e hizo que los migrantes ahora intenten también llevar a sus hijos hacia Estados Unidos. La mayoría de los menores viajan sin compañía familiar.
Esto obligó a que Ecuador refuerce sus sedes diplomáticas en México y envíe a un embajador de carrera con amplia experiencia como Francisco Carrión.
La otra arista que sigue cobrando importancia en la relación bilateral es la de seguridad. Especialmente desde que el narcoterrorismo ha crecido en Ecuador.
El gobierno del presidente Lasso ha intensificado la búsqueda de apoyo internacional en la materia y el principal aliados es Estados Unidos. Pero México y Colombia, por ser las sedes de los carteles más grandes de la región, representan actores clave.
A finales de 2021, hubo una reunión de cooperación entre las fuerzas armadas de ambos países; para tratar temas de seguridad operacional; temáticas de aeronaves; sistemas de vigilancia y control, especialmente de espacio aéreo; educación y adiestramiento militar; artefactos explosivos; ciberseguridad y ciberdefensa.
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