¿Cómo afecta el ayuno por el Ramadán a los futbolistas profesionales?

Durante el partido del Manchester United ante la Real Sociedad, disputado el 6 de marzo por la Europa League, el árbitro detuvo la acción a los 20 minutos por una razón singular: se permitió que los futbolistas Nayef Aguerd y Noussair Mazraoui puedan acercarse al banquillo de suplentes para alimentarse e hidratarse.

Esto, debido a que ambos son musulmanes y, en dicho momento, comenzaba el anochecer, por lo que los jugadores podían romper el ayuno del Ramadán.

Esta es una práctica que ya se ha convertido en costumbre en el fútbol europeo. También ocurrió durante el partido entre el FC Barcelona y el Benfica, en el que se detuvo el compromiso para que Lamine Yamal, la joven figura del equipo catalán, pueda alimentarse.

¿Cómo puede un futbolista musulmán dejar de comer durante tantas horas, por todo un mes, y mantener su buen estado físico?

Apoyo de clubes e instituciones

En este año, el Ramadán tiene lugar del 1 al 30 de marzo. Durante este período, las personas que profesan el Islam deben evitar comer y beber desde el amanecer hasta el anochecer. Hay excepciones para esta regla, como es el caso de ancianos y enfermos crónicos, pero los deportistas musulmanes de alto rendimiento sí cumplen, a cabalidad, con el ayuno. 

En temporadas pasadas, algunos futbolistas debían esconder que estaban cumpliendo con el Ramadán, pues era mal visto o sufrían de discriminación por su religión. 

A veces, debían ingeniárselas dentro del equipo para poder romper el ayuno en la puesta del Sol. Por ejemplo, pedían a algún compañero que finja una lesión, para poder aprovechar este tiempo para comer e hidratarse.

Ha habido, incluso, falta de empatía por parte de instituciones importantes, como la Federación Francesa de Fútbol, que en 2024 prohibió que los jugadores musulmanes ayunen, lo que causó que el volante Mahamadou Diawara, de la Sub 19, decida abandonar la concentración. 

Sin embargo, en este año se ha demostrado una total apertura por parte de equipos y federaciones para los jugadores musulmanes. Es por esta razón que la UEFA ordenó a los árbitros que paren los partidos  durante la puesta de Sol, para la alimentación de los futbolistas.

Además, los clubes realizan planes especiales de nutrición para sus futbolistas, como ha sido el caso del FC Barcelona con Lamine Yamal. El joven jugador de 17 años, quien participa en el Ramadán en honor a su abuela, ha recibido un plan específico de alimentación por parte de su equipo para este mes.

"Es la fe que tienes en tu religión, es algo que lo hago porque tengo la salud para hacerlo. A las cinco de la mañana me levanto para rezar y tomar electrolitos. No influye en nada, el club está más que preparado y saben que puedo rendir al 100%", explica el futbolista en una entrevista con DAZN.

¿Cuáles son los cuidados que debe realizar un futbolista?

Recientemente, la FIFPro (la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales) publicó una guía con consideraciones para los jugadores durante el Ramadán. 

En cuanto a la nutrición, los deportistas pasan de tres comidas al día a solo dos, por lo que se recomienda que el desayuno sea la comida más sustancial, con alimentos altos en glucosa, como papas y arroz, para aportar mucha energía durante el día, mientras que la cena debe ser todo lo contrario. 

La hidratación es un tema más complicado. En la noche hay que encontrar el balance entre beber bastante agua y dormir las horas adecuadas, mientras que durante el día se puede evitar la pérdida de líquidos con toallas mojadas, duchas frías o mojarse únicamente los labios.

También se pueden establecer horarios especiales para los futbolistas musulmanes. Entrenamientos durante las últimas horas de la tarde pueden ser perjudiciales, pues son los momentos más críticos del día, así que puede ser mejor postergar estos trabajos para las primeras horas de la noche, después de la alimentación.

Finalmente, el tema psicológico debe ser tomado en cuenta, pues es un período complicado que dura un mes. 

"Para un deportista de alto rendimiento, ayunar no es lo ideal. Sin embargo, el elemento espiritual del Ramadán puede servir mentalmente como una motivación adicional para rendir mejor", explica el doctor Vincent Gouttebarge, jefe del departamento médico de la FIFPro.