El defensa Ehsan Hajsafi se convirtió en el primer miembro de la selección nacional de Irán en hablar en apoyo a las protestas antigubernamentales en su país, diciendo que los jugadores deberían ser la voz de los que sufren.
Después de más de dos meses de protestas en Irán, desencadenadas por la muerte de una mujer de 22 años mientras estaba detenida por la policía de la moral del país, se ha formado uno de los desafíos más audaces a sus líderes clericales desde la Revolución Islámica de 1979.
La selección nacional de Irán ha estado en el punto de mira en el período previo a la Copa Mundial de Qatar, con la expectativa de si los jugadores utilizarán el evento futbolístico como plataforma para mostrar su solidaridad con el movimiento de protesta.
"Deben saber que estamos con ellos. Y que los apoyamos. Y nos solidarizamos con ellos en lo que respecta a las condiciones", declaró Hajsafi, que juega en el AEK de Atenas, en una rueda de prensa.
"Tenemos que aceptar que las condiciones en nuestro país no son las correctas y que nuestra gente no está contenta", dijo. "Estamos aquí, pero eso no significa que no debamos ser su voz o que no debamos respetarlos".
La ola de disturbios estalló en septiembre después de que la mujer kurdo-iraní Mahsa Amini muriera bajo custodia de la policía de la moral por llevar ropa considerada "inapropiada". El gobierno iraní culpa a los enemigos extranjeros de la crisis.
Algunos deportistas iraníes han hecho gestos que los manifestantes consideran muestras de apoyo, como no cantar el himno nacional o no celebrar las victorias en el campo.
Según la agencia de noticias activista HRANA, hasta el viernes habían muerto 410 manifestantes en los disturbios, incluidos 58 menores.
Otros miembros del equipo han evitado hasta ahora hablar de política en público. Los jugadores Karim Ansarifard y Morteza Pouraliganji se negaron a responder a preguntas sobre la solidaridad con las mujeres en Irán.
El centrocampista Alireza Jahanbakhsh, que juega en el Feyenoord holandés, sugirió que esas preguntas eran una estratagema para distraer al equipo.
Sin embargo, el delantero del Bayer Leverkusen Sardar Azmoun fue seleccionado para el equipo a pesar de haber apoyado públicamente las protestas en el pasado.
Algunos activistas se han posicionado en contra de la selección por no hacer lo suficiente, y han hecho un llamamiento a los iraníes para que se concentren en las principales plazas de las ciudades y pueblos de todo Irán.
Hajsafi dijo que era innegable que la situación no era buena. "Espero que las condiciones cambien en cuanto a las expectativas de la gente. Todo lo que tenemos es de ellos y tenemos que luchar, tenemos que rendir lo mejor posible y marcar goles y representar al pueblo".