El tipo de cambio entre el euro y el dólar estadounidense alcanzó la paridad, lo que significa que las dos monedas valen lo mismo.
El euro alcanzó el 12 de julio de 2022 la paridad con el dólar por primera vez en dos décadas, lastrado por la amenaza de que un corte de suministro de gas ruso en la Unión Europea lleven a la recesión económica a esa zona.
Pero el euro logró recuperar algunas posiciones rápidamente, por lo que no llegó a pagarse por debajo de un dólar.
De todos modos, el papel del dólar como moneda de refugio para los inversores se ha intensificado en las últimas semanas. Lo anterior ha hecho que la moneda estadounidense escale a máximos de dos décadas frente a múltiples pares.
El euro ha sido particularmente vulnerable debido al impacto de un aumento constante en los precios del gas natural en la economía regional y la guerra en la vecina Ucrania.
Al mismo tiempo, el Banco Central Europeo está detrás de sus rivales en la serie de aumentos de tasas de interés.
El índice dólar ganó 0,3% a 108,48 unidades, mientras que la libra esterlina alcanzó otro mínimo de dos años. Mientras tanto, el yen estaba a poca distancia de su punto más bajo en más de dos décadas.
Una tormenta perfecta
Los analistas del grupo financiero japonés Mizuho dijeron que el movimiento hacia la paridad estaba ocurriendo porque "se está dando por descontada una recesión en la zona euro".
Los expertos añadieron que el contexto sugería poco para mejorar la confianza en el riesgo.
"De cualquier manera, parece que hay poco que impida que el euro/dólar rompa la paridad en un plazo relativamente corto", escribieron.
Nerviosismo entre inversores
Los mercados están a la espera de conocer los datos macro, incluida la inflación al consumidor de Estados Unidos que se publicará el 13 de junio.
También hay expectativa en los inversionistas sobre los comentarios de los funcionarios de la Reserva Federal.
Mientras tanto, los inversores buscan pistas sobre el resultado de la próxima reunión de política de la Reserva Federal de Estados Unidos, antes del período de silencio previo a la reunión.
En los mercados de renta variable, el Euro STOXX caía un 0,7%, mientras que el DAX alemán bajaba un 0,8% y el FTSE 100 británico cedía un 0,44%.
Los mercados de futuros de Estados Unidos también apuntaban a una apertura en rojo.
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