'Kleo' es una buena opción para este feriado. El éxito de esta producción alemana ha confirmado que sí se filmará una segunda temporada.
'Kleo' se pone en tendencia en la cartelera de Netflix y el mismísimo Stephen King la califica como "una bocanada de aire fresco".
Tras la caída del Muro de Berlín, una exespía de Alemania Oriental llamada Kleo decide averiguar quiénes la traicionaron y para obtener pistas e información usa tácticas letales para vengarse de sus enemigos.
Creada por Hanno Hackfort, Bob Konrad, Richard Kropf, esta serie se enmarca en el género de suspenso y nos invita a viajar por la Berlín de la Guerra Fría, donde oscuros personajes caminaban ocultos luciendo pesados abrigos y miradas cargadas de astucia.
Estamos ante una disparatada aventura que se divide en ocho episodios y que mezcla jovialidad, música a todo volumen y un ritmo trepidante en el tratamiento del guion.
Los internautas siempre tienen su opinión crítica bajo la manga. Dariow, por ejemplo, advierte la influencia de Tarantino:
Una serie para engancharse: Kleo, alemana con espíritu de cómic ambientada en la época de la caída del muro. Trata de imitar a Tarantino, no le sale bien pero se disfruta. Está en Netflix
— dariow (@dariow1) October 29, 2022
El personaje Kleo está interpretado por el joven talento de Jella Haase. Estrella de las redes sociales y que ha interpretado películas de corte adolescente en tono de comedia e ironía como 'Policía 110'.
Haase se inició sobre las tablas, en obras de teatro clásico, lo que le brinda una gran destreza a la hora de mirar a la cámara y ofrecer actuaciones camaleónicas.
'Kleo' exige en, cada uno de los capítulos, que la actriz se disfrace y se transforme en mujeres hechiceras, atractivas o intelectuales.
A pesar de que 'Kleo' baila, bebe y se divierte mientras persigue a sus enemigos, un vacío interior marca su mirada.
En el siguiente video de TikTok podemos ver sus transformaciones:
'Kleo' también es una revisión por la historia de Alemania, tras la caída del Muro de Berlín, época cuando reventó la música electrónica, creció la moda y la afluencia a los clubes nocturnos.
Un Berlín anárquico, fincas soleadas en Mallorca y hasta el desierto chileno de Atacama, desfilan ante nuestros ojos en esta serie, no exenta de la fina ironía.
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