El reelecto presidente de Rusia, Vladimir Putin, fue el primero en referirse a una 'Tercera Guerra Mundial', al hablar de la supuesta presencia de la OTAN en Ucrania.
Vladimir Putin y Kim Jong-un vuelven a tener en vilo al mundo. La reelección del actual Presidente de Rusia para un quinto mandato fue el disparador de una pregunta que atemoriza: ¿Habrá Tercera Guerra Mundial?
El tema pone en alerta al mundo por la situación que Rusia enfrenta en Ucrania y a la que puede involucrarse la OTAN.
En Ucrania, país que enfrenta una guerra con Rusia desde febrero de 2022, la OTAN asiste con el suministro de armamento e información para enfrentar al Kremlin.
Pero, el envío de tropas se mantiene todavía sin un pronunciamiento oficial, pese a que Putin reconoció que aquello es un hecho.
"Los soldados de los países de la OTAN están allí presentes. No es nada bueno, principalmente para ellos, ya que mueren en grandes cantidades", manifestó Putin, en una de sus intervenciones tras conocerse ganador de las elecciones presidenciales, cuestionadas por Occidente.
El riesgo en palabras de Putin
Consultado por el impacto para Rusia de la supuesta presencia militar de la OTAN en Ucrania, Putin manifestó que "eso nos colocará a un paso de una Tercera Guerra Mundial a gran escala. No creo que a nadie le interese esto".
Cabe resaltar que Moscú cuenta con más de 5.000 ojivas nucleares, la cifra más alta del mundo, según la Federación de Científicos Estadounidenses.
Por su parte, la OTAN maneja una cifra similar de armamento nuclear, siendo Estados Unidos su principal representante.
Kim Jong-un 'se prepara'
Sin duda alguna, en el mundo no se puede hablar de Tercera Guerra Mundial sin mencionar a Kim Jong-un, el icónico líder de Corea del Norte.
Más allá de que su armamento nuclear no ha sido confirmado, los constantes pruebas de lanzamientos de misiles que realiza Corea del Norte hacen sospechar de un potencial de entre 35 y 65 ojivas nucleares.
De hecho, en 2022 la propia Corea del Norte se declaró como un Estado con armas nucleares.
A esto hay sumarle que el 18 de marzo de 2024, Kim Jong-un supervisó el lanzamiento de misiles balísticos al mar de Japón durante la visita de Antony Blinken, secretario de Estado de EE.UU. a Corea del Sur.
Ante este escenario, la respuesta de Occidente es de cautela. La atención está concentrada en condenar el proceso electoral ruso y no reconocer sus resultados. La premisa de defensa de la OTAN sigue siendo la misma: si Rusia ataca a uno de sus países miembros, todos responderán.
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