La atleta de Imbabura recibió dos distinciones como la mejor atleta en las carreras de velocidad. Se alista para un año retador.
La Federación Ecuatoriana de Atletismo (FEA) designó a Anahí Suárez como la mejor atleta de las pruebas de velocidad que tiene el país y la Asociación de Periodistas Deportivos de Pichincha le entregó el Equinoccio de Plata, el trofeo emblemático que se entrega a los deportistas élite de Ecuador.
"Estos trofeos son el reconocimiento a la superación, al trabajo diario", dice Anahí Suárez, la atleta que esta semana cumplirá 22 años y que ya está clasificada en la prueba de 200 metros y en el relevo mixto para los Juegos Panamericanos de Santiago de Chile.
Es poseedora de más de un centenar de medallas y trofeos, pero Anahí va por más. En 2018 alcanzó la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de la Juventud. "Esa medalla es especial para mí porque me di cuenta que podía alcanzar los resultados que hoy tengo".
Otra medalla que guarda un significado especial para la atleta imbabureña es la que logró el año pasado en los Juegos Sudamericanos de Asunción.
Cuatro años antes, ella estaba en una residencia mirando la participación de Marizol Landázuri y Angela Tenorio en los 100 metros. Celebró el triunfo de Marizol, porque fue su compañera de entrenamiento. "En ese momento me prometí que yo estaría allí algún día y lo cumplí".
Anahí Suárez recibe el premio de la APDP, el 19 de enero de 2023. Armando Prado
Y no solo que cumplió, sino que logró la clasificación a los Juegos Panamericanos de este año, que se celebrarán en Chile.
Se trata del tercer torneo del ciclo olímpico y Anahí, tiene la posibilidad de pelear no solo por una de las tres medallas sino también por lograr el cupo a los Olímpicos de París 2024.
"¿Por qué no soñar con lograr la medalla en el Mundial de Atletismo? Estoy entrenando para ello, para lograr buenos resultados", enfatiza con la seguridad que le han dado estos cinco años que está en la élite del atletismo.
La única medalla a nivel mundial que posee la alcanzó en 2021 en la prueba de los 4x200 metros, relevo mixto, en la categoría juvenil.
Este año, quiere subir al podio en la división senior, donde tiene a grandes rivales por delante. En 2022, en el Mundial en Oregon, avanzó a las semifinales en los 200 metros.
'Nunca había llorado en un entrenamiento'
En 2018, cuando llegó a entrenar a Quito con la selección nacional de velocidad, sus marcas y su condición física hicieron que su entrenador, Nelson Gutiérrez, la proyectara al alto rendimiento.
Sus pruebas individuales son los 100 y 200 metros, las carreras de velocidad pura. Desde hace un año, incursionó en los 400 metros, la carrera completa al anillo atlético.
"Ha sido muy duro el trabajo para esta distancia. Nunca había llorado en un entrenamiento, ahora me tocó. Mi equipo me ha ayudado mucho a romper mis miedos".
Anahí Suárez, atleta.
Los miedos a confirmar que podía hacerlo porque sus condiciones fisiológicas son ideales para estas pruebas. Posee una reacción rápida en salida, fuerza para tomar las curvas con mucha naturalidad y la velocidad explosiva para el remate en los 50 metros finales.
Desde diciembre de 2022 comenzó su año deportivo. Aún realiza los trabajos físicos de la pretemporada.
En marzo, tendrá su primera gran prueba: el Festival de Velocidad, que por primera ocasión realizará la Federación Ecuatoriana de Atletismo. El escenario será la pista del estadio Alberto Spencer, en Guayaquil, donde Anahí ya ha competido y ganado.
Irá a la gira por Europa, para tomar ritmo de competencia y alistarse para el Mundial que se realizará en Bulgaria. En octubre serán los Juegos Panamericanos en Chile.
Si bien su rendimiento se mide en marcas, récords y medallas, Anahí Suárez siente que hoy tiene otras responsabilidades, la de dejar huella en los atletas que actualmente le acompañan a los entrenamientos.
"Yo empecé así, tomando como referencia a Ángela Tenorio. Hoy tengo como compañeras de equipo a chicas que están empezando, pero que tienen gran talento. Son a ellas a quienes quiero motivar en cada entrenamiento".
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