En 2022, el equipo guayaquileño asistió al Mundial en Irlanda y ahora se entrena para viajar a un campeonato en Argentina.
Juan Marín se quedó sin respuestas cuando un muchacho, con síndrome de Down, llegó al entrenamiento del club Yaguares de rugby, en Guayaquil, y pidió entrenar con ellos. "No sabía qué responder".
Juan es español, llegó a Ecuador en 2008 y desde entonces ha promovido la práctica del rugby. Fundó el club con estudiantes de la Universidad Casa Grande -donde laboraba-. Lleva 50 años practicando rugby.
Ha sido jugador, entrenador y dirigente. Incluso fue presidente de la Federación Ecuatoriana de Rugby, pero no tenía conocimiento que el rugby podía ser practicado por muchachos con esa condición.
"Llamé a clubes en Valencia, España y me hablaron del rugby inclusivo", comenta. Conoció que existen torneos de clubes y hasta un campeonato mundial que se disputó por primera vez en 2015 y luego en 2017.
En la edición de 2022, 10 chicos ecuatorianos, hombres y mujeres, estuvieron presentes en el certamen que se desarrolló en Irlanda.
Entre 2017 y 2022, Juan difundió el rugby inclusivo en Guayaquil, específicamente, con tal impacto que hoy cuenta con 170 chicos con discapacidad intelectual y síndrome de Down, desde los 12 años.
"Hablé con los entrenadores, evaluamos la condición física de los chicos y su capacidad para dominar el balón. Al principio se les caía, pero el entrenamiento les ha ayudado".
En el primer año, presentó un proyecto piloto, que contó con el respaldo del Municipio de Guayaquil, que se ha ido renovando cada año por los resultados que se han alcanzado.
"El rugby mejora su motricidad, promueve el juego en equipo, el respeto, la camaradería y sobre todo destaca sus ganas de competir".
Juan Marín, entrenador de rugby.
Juegan en el mismo campo y pelota que lo hacen los jugadores regulares. El único cambio reglamentario que adoptan es el que tienen que tienen que chocar, para evitar lesiones cervicales.
"Tomamos el reglamento que rige en los torneos para mayores de 50 años".
En el club Yaguares se entrenan chicos entre los 12 y 18 años, su juego es más recreativo.
Seis entrenadores se encargan de dirigir el trabajo diario que se realiza en el club El Nacional en Guayaquil, en diferentes horarios, pues según la norma internacional del deporte inclusivo, se recomienda el trabajo de ocho deportistas por cada entrenador.
El rugby inclusivo tiene otra norma: juntar jugadores con y sin discapacidad para promover la verdadera inclusión social, "porque es la sociedad la que discrimina".
En lo deportivo, esa inclusión se convierte en formar un verdadero equipo dentro y fuera de las canchas.
"En el Mundial, por ejemplo, pusimos en cada departamento a dos chicos con discapacidad y a otros dos sin discapacidad".
La sociedad y amistad que tienen en los alojamientos se traslada a la cancha, pero además se crean otros nexos, por ejemplo, "los chicos sin discapacidad les enseñan cómo y qué llevar en su maleta para cada partido, o cuidar el dinero que llevan, para que no se gasten todo en un solo día".
Rumbo al Mundial 2025
Este 2023, el Club Yaguares comenzó la preparación para el Mundial de 2025 y Juan Marín quiere conformar un equipo competitivo, tanto en damas como en varones.
Trabaja con un grupo de 30 chicos con los que realiza esta preparación. Este año viajarán a Cuenca para realizar partidos de exhibición.
Desde Argentina llegó una invitación para que Ecuador asista a su campeonato nacional.
"Ellos tienen 20 equipos, allá está muy desarrollado el Mixed Ability Rugby, como se llama hoy".
Al torneo acudirán equipos de Chile y Uruguay, que también promueven este deporte en sus respectivos países.
La idea es llegar en un nivel competitivo óptimo. En el Mundial 2022 estuvieron presentes 1.200 deportistas repartidos en 28 equipos de 16 nacionales.
En el Mundial, las chicas ecuatorianas fueron incluidas en el equipo de Italia. Esta vez, el objetivo es participar como club.
"En Sudamérica somos el único club que cuenta con equipo femenino y chicos menores de 18 años".
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