River Plate venció 1-0 a Boca Juniors en el Superclásico este domingo 7 de mayo en el estadio Monumental ante 83.000 espectadores por la decimoquinta fecha de la liga argentina.
El colombiano Miguel Borja anotó de penal, en el minuto 90+3, el gol de la victoria para River, en un duelo que tuvo un final escandaloso y cargado de controversias.
Por incidentes y cruces violentos entre los jugadores después del gol, fueron expulsados Agustín Palavecino y los suplentes Ezequiel Centurión y Elías Gómez por River; y Nicolás Valentini, Miguel Merentiel, Ezequiel Fernández y el entrenador Jorge Almirón por Boca.
Con este triunfo, River estiró su ventaja y se mantiene al frente de la liga con 37 puntos, mientras que Boca continúa en la mitad de la tabla, en el puesto 13 con 18 unidades.
Desde el comienzo River fue el que impuso condiciones, a partir de una presión muy alta en todos los sectores con la que ahogó a Boca, imposibilitado de tener el balón y poder dar al menos dos o tres pases seguidos.
En la primera parte River tuvo el control del balón durante el 70% del juego, aunque le costó generar situaciones claras, ante un Boca de planteo netamente defensivo, que se plantó con cinco defensores.
Las únicas situaciones atractivas en el resto de la primera parte fueron un cabezazo desviado de Lucas Beltrán y un tiro libre frontal de Nacho Fernández que Romero controló sin problemas.
Cambió Boca en la segunda parte, con un juego más abierto, y así estuvo cerca en una incursión del colombiano Sebastián Villa, parado a tiempo en un gran cierre de Milton Casco.
Parecía que nada más fuera a suceder hasta que en tiempo de descuento llegó la jugada que cambió la historia, en un penal de Agustín Sandez, que llegó tarde a un cruce y le cometió infracción a Pablo Solari.
Borja anotó el gol de la victoria con un remate suave y esquinado, y mientras el colombiano festejaba en solitario, a sus espaldas se iniciaba una batalla, que se inició por una celebración excesiva de Agustín Palavecino ante los jugadores de Boca.
Tras varios minutos de disturbios en el campo de juego, el árbitro Darío Herrera, a instancias del VAR, dispuso tres expulsados en Boca, que así terminó el cotejo con ocho jugadores, y a Palavecino y dos suplentes por el lado del Millonario.
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