'Garfield fuera de casa', de estreno en Ecuador, retoma las películas basadas en este gato amante de las lasañas.
Gordo, perezoso, amante de la lasaña y alérgico a los lunes. El gato Garfield, creado por el dibujante Jim Davies en 1978, se mantiene vigente gracias a las series y películas que cada cierto tiempo aparecen.
En los cines de Ecuador, justamente, se acaba de estrenar 'Garfield fuera de casa', que nos trae al gato que todos amamos, pero con ligeros cambios. Sí, continúa siendo tan glotón y sigue mortificando a su amo Jon y al perro Odie, pero ha perdido parte de ese sabroso sarcasmo aplicado a la vida cotidiana que le era tan característico en las tiras cómicas.
Estamos ante un Garfield para niños, que debe arriesgarse a salir del confort de su casa cuando aparece su padre, un auténtico bala perdida, y vivir una aventura llena de peripecias. El gato protagoniza una hilarante comedia sin pretensiones intelectuales que la vuelvan pesada.
Esto es mérito del director John Debney, el padre de esa maravilla de la comedia noventera llamada 'Las locuras del emperador', una joya de Disney antes de su extravío ideológico.
Ágil, clara y con personajes que se dan tiempo de contarnos quiénes son, la película de Garfield se vuelve disfrutable y demuestra el buen momento de Sony en el campo de este tipo de animación. Incluso, hay momentos de real elegancia.
En el doblaje, la voz de Garfield está a cargo del comediante mexicano Memo Villegas, famoso por su participación en el canal Backdoor y en 'El teniente Harina'. Esto ha generado algo de ruido en redes, pues la voz del gato siempre la puso su compatriota Sandro Larenas.
Los niños salen encantados de la función y con ganas de comer lasaña. ¿Y los adultos? Bueno, quizás los más acérrimos fans estarán desconcertados por esa ausencia de mordacidad. De todos modos, el guion contiene algunas bromas para los mayores de edad y deja un mensaje positivo, ideal para compartir con los pequeños de la casa.
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