El presidente electo de Panamá, José Raúl Mulino, sustituyó en la papeleta al exmandatario, Ricardo Martinelli, inhabilitado por una condena de lavado de activos.
Tras una campaña de apenas dos meses, José Raúl Mulino ganó las elecciones presidenciales de Panamá, el domingo 5 de mayo de 2024. Una de sus ofertas bandera fue "cerrar la selva del Darién", que atraviesan miles de migrantes cada año.
Mulino entró en la contienda electoral cuando sustituyó al exgobernante Ricardo Martinelli, quien fue inhabilitado tras ser condenado en febrero de 2024 por lavado de activos.
Impulsado por la popularidad de Martinelli, José Raúl Mulino, de 64 años, se alzó con la victoria con un 34% de votos frente a 25% del centroderechista Ricardo Lombana.
Mulino es un abogado derechista con fama de autoritario. Irascible y tajante, reconoce ser de carácter fuerte. "El gobierno es el que manda y, si se equivoca, vuelve y manda", afirmó hace poco.
Sin titubeos propuso como solución a la crisis migratoria "cerrar el Darién", la inhóspita selva fronteriza con Colombia por donde pasó medio millón de personas en 2023. "La frontera de Estados Unidos en vez de Texas se corrió a Panamá", aseguró.
Cuando fue ministro de Seguridad del gobierno de Martinelli (2009-2014), durante una oleada de protestas, llamó a gritos "maleantes de mierda" a un grupo de trabajadores que bloqueaban el tránsito.
Aunque es confrontativo, no acudió a ningún debate presidencial, muy seguro de la popularidad de su mentor, que se asiló en febrero en la embajada de Nicaragua, donde hizo campaña por él.
En la jornada electoral del domingo, tras votar, visitó a Martinelli en la legación diplomática. "Vamos a ganar", se dijeron con un fuerte abrazo.
A la sombra de Martinelli
El papel que jugará Martinelli en un gobierno de Mulino a partir del 1 de julio es toda una incógnita. Sus adversarios sospechan que le podría dar un salvoconducto para que salga de la embajada. Incluso, algunos piensan que será el exgobernante el que ejerza el poder detrás del trono.
Mulino debe su triunfo a los miles de seguidores de Martinelli, a quien llaman el "Loco", y que sueñan con una nueva versión de los años de bonanza económica.
"El voto de Martinelli es lo que me tiene aquí", reconoció en campaña Mulino, para quien el juicio donde su exjefe fue condenado a 11 años de prisión fue "una farsa".
Pero este lunes 6 de mayo, tras la victoria electoral, su discurso se contradijo y aseguró que no es "títere de nadie".
"Yo no estoy aquí porque me puso alguien", dijo Mulino durante su discurso de victoria en un hotel de Ciudad de Panamá, en medio del júbilo de sus seguidores.
Lo último