La final se jugará el viernes 21 de agosto de 2020, en Colonia (Alemania), a partir de las 14:00 (hora de Ecuador) y será transmitido por las cadenas ESPN y Fox Sports. La edición quedará marcada por el novedoso formato obligado por la pandemia de coronavirus.
El Covid-19 obligó a la UEFA a concluir la Europa League con una fase final concentrada en varios estadios alemanes y con los encuentros a puerta cerrada, y al último de ellos llegan los dos clubes que han mostrado más solvencia y que mejor se han adaptado a los circunstancias.
El Inter de Italia y el Sevilla de España acabaron muy bien sus torneos locales, el conjunto italiano segundo -tras la Juventus-, y el español como cuarto clasificado -empatado con el tercero (Atlético Madrid)-y a ello le dieron continuidad en Alemania.
El protagonista del torneo es el Sevilla, que lo ganó en cinco ocasiones (2006, 2007, 2014, 2015 y 2016) en todas las veces que acudió a la final. Pero el Inter también tiene en sus vitrinas tres trofeos de campeón de la Copa de la UEFA/Liga Europa (1991, 1994 y 1998).
El palmarés de estos dos equipos, que la próxima temporada jugarán la Champions League, augura un buen espectáculo futbolístico en la final, para la que la UEFA ha abierto algo el protocolo sanitario y ha dejado que, aparte de las delegaciones oficiales, asistan una veintena de personas por cada club.
En Alemania, el Sevilla eliminó en octavos a la Roma (2-0) -también a partido único-, en cuartos al Wolverhampton (1-0) y en semifinales al Manchester United (2-1). En los tres partidos, el entrenador Julen Lopetegui utilizó de inicio la misma alineación.
Por ello, es previsible que el viernes haga lo mismo, pues todos están disponibles, incluido el extremo argentino Lucas Ocampos, que no quiere perderse el partido pese a que tiene algunas molestias en una rodilla.
Inter llega a la final en el mejor momento del año, con una defensa sólida que solo recibió un gol en los últimos siete partidos, una delantera explosiva liderada por Romelu Lukaku y Lautaro Martínez (juntos acumulan 54 goles) y con las ganas de cortar una racha de 10 años sin ganar trofeos internacionales.
Es Antonio Conte el técnico de un equipo que este año acabó la Serie A en la segunda posición y fue semifinalista de la Copa Italia. Lo hizo luciendo los mejores números defensivos de Italia, a los que sumó en las últimas semanas un rendimiento ofensivo sobresaliente.
En su camino hacia la final, doblegó al Getafe (2-0), al Leverkusen (2-1) y goleó 5-0 al Shakhtar Donetsk con una asombrosa prueba de fuerza defensiva y ofensiva. Si se cuentan los últimos dos partidos de la Serie A, el Inter solo recibió un gol en cinco partidos y anotó once.
El equipo cuenta con una mezcla de experiencia, con elementos como el uruguayo Diego Godín, que busca su tercera Liga Europa, el inglés Ashley Young o el danés Christian Eriksen, y juventud, con talentos como el volante Nicolò Barella o el Toro Lautaro.
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