El equipo italiano masculino de persecución batió su propio récord del mundo en la conquista del oro olímpico, sobre el velódromo de Izu.
La nueva marca mundial, 3:42.032, mejora en 5 milésimas la lograda por el equipo de Italia en la víspera en el mismo escenario. Los plusmarquistas compitieron en la final a una velocidad de 64,856 km/h.
Italia venció al equipo de Dinamarca en la carrera por la medalla de oro, con un tiempo de 3:42.198 para los nórdicos.
El cuarteto italiano formado por Filippo Ganna, Simone Consonni, Francesco Lamon y Jonathan Milan, celebró a lo grande en la meta, golpeando sus puños en el pecho, tras poner fin a la larga espera de su país por una medalla de oro olímpica en la prueba.
El tren italiano, vestido de azul, lideró la primera mitad de las 16 vueltas al óvalo de madera de 250 metros, pero luego Dinamarca tomó la delantera.
Dinamarca abrió lo que parecía ser una ventaja decisiva de casi un segundo, pero Italia no se dio por vencida. Ganna aceleró y su equipo empezó a reducir la desventaja y se hizo con el oro en la última vuelta.
En la lucha por el bronce en la persecución por equipos, el equipo australiano dobló al de Nueva Zelanda.
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