Un Tribunal de la Sala Penal de la Corte Nacional de Justicia restituyó el estado de inocencia de los hermanos Roberto y William Isaías una vez que no se probó peculado en el caso Filanbanco.
El Tribunal de Revisión de la Sala Penal de la Corte Nacional de Justicia revisó la sentencia en contra de los hermanos Roberto y William Isaías Dassum y restituyó su estado constitucional de inocencia.
La decisión se tomó una vez que no se comprobó el delito de peculado por el abuso de los fondos de préstamos de liquidez entregados por el Banco Central del Ecuador a Filanbanco en 1998.
El dictamen incluye a Antonio Arenas Contreras, Juan Franco Porras y a Leonardo Navas Banchón.
Sin embargo, la Corte dispone que los bienes entregados por Filanbanco S.A. en la crisis bancaria, no serán devueltos, "por considerar que fueron producto del cumplimiento de obligaciones de carácter civil y administrativo, que son independientes de la responsabilidad penal".
La sentencia también niega el derecho a la repetición de los involucrados, "pues la presente causa fue juzgada en ausencia de los beneficiarios de esta sentencia".
El 10 de abril de 2012, el juez Wilson Merino dictó sentencia condenatoria en contra de los Isaías y demás procesados por considerarlos autores de peculado y les impuso una pena de 8 años de reclusión, decisión que fue apelada.
En 2014, los recursos de apelación presentados fueron declarados sin lugar. Luego de un largo proceso judicial, la Corte Nacional revisó la sentencia y declaró su inocencia el 19 de mayo de 2021.
El abogado de los hermanos Isaías, Jorge Zavala Egas, dijo a PRIMICIAS que esperará a que se ejecutoríe la decisión de la Corte -que será en tres días hábiles-, luego de lo cual pedirá la revocatoria de los autos de prisión y el desestimiento de la Corte Nacional del pedido de extradición de sus defendidos.
"Luego de esto, la familia Isaías decidirá en santa paz y calma qué hará con su vida".
Jorge Zavala Egas, abogado de los Isaías.
La sentencia obtuvo tres votos de mayoría y el voto salvado del juez Marco Rodríguez.
Lo último