Un tribunal de La Paz la encontró culpable por resoluciones contrarias a la Constitución para ocupar la Presidencia del país tras el derrocamiento de Evo Morales.
La expresidenta transitoria de Bolivia, Jeanine Áñez, recibió una condena a 10 años de cárcel por los sucesos de 2019 que ocurrieron tras el derrocamiento de Evo Morales.
El Tribunal Primero de Sentencia de La Paz la encontró culpable por los delitos de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución.
El juicio por el caso "golpe de Estado II" se debatió sobre las acciones de Áñez cuando era segunda vicepresidenta del Senado y asumió la Presidencia de forma supuestamente irregular.
Ella asumió el mando tras la renuncia de Morales y de toda la línea de sucesión presidencial. Esos hechos ocurrieron en medio de denuncias de fraude electoral contra el entonces mandatario indígena y aspirante a la reelección.
Carolina Ribera, hija de Áñez, dijo que este "juicio ha sido grosero". Aseguró que durante el anuncio de la sentencia su madre se encontraba sin ninguno de los abogados.
Y en su última declaración previo a la sentencia, Áñez manifestó que "el poder político lo que está haciendo es vengarse".
Para Morales y el oficialismo, Áñez fue una de las protagonistas de lo que aseguran fue un golpe de Estado.
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