El registro del número de cédula para acceder al censo en línea causa resistencia. La protección de datos es vulnerable en Ecuador y eso hace que las personas no quieran compartir información sensible.
Más de 969.000 personas se habían censado en línea en Ecuador hasta el 17 de octubre, pero hay quienes dudan a la hora de registrar su número de cédula en el formulario del censo.
Cuando el INEC presentó la modalidad de censo en línea, anunció que uno de los requisitos para completar el formulario sería inscribir la cédula.
David Revelo, un quiteño de 30 años de edad que está pensando en hacer el censo en línea, dice que teme el riesgo de entregar información, como el número de cédula.
Como Revelo, hay ciudadanos que se resisten a llenar el formulario porque temen exponer su número de identidad.
Sin embargo, el director ejecutivo del INEC, Roberto Castillo, dice que "la persona tiene libertad para colocar o no su número de cédula".
El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) espera alcanzar los tres millones de ciudadanos censados en línea hasta el 31 de octubre, fecha en que termina el proceso.
Mientras que el resto de los 15 millones de ciudadanos de Ecuador será censado de manera presencial.
No tiene valor estadístico
Diego Beltrán, abogado especializado en ciberseguridad y protección de datos, explica que aunque el requisito de la cédula puede ser optativo, se vuelve un requerimiento de facto.
"El hecho de que se haya consignado un campo para ello, no le permite a la ciudadanía discernir si es un dato que puede entregarse de manera voluntaria u obligatoria", añade. Por lo tanto, la mayoría lo hará.
El censo arrojará información como el lugar de domicilio, número de propiedades, enseres domésticos, si a lo anterior se suma el número de cédula quedarán expuestos otros datos considerados sensibles.
Según la Ley de Protección de Datos Personales se considera como información sensible:
- Tipo de sangre.
- Nombre de los padres.
- Ascendencia.
- Código dactilar.
Beltrán explica que el censo recoge un volumen profundo de información y que el número de identidad, a su vez, tiene emparejados datos sensibles, como los mencionados.
Es decir, agrega Beltrán, que el dato de la cédula configura un panorama completo sobre el individuo, mucho más allá de un número.
"Y esto no tienen ningún tipo de valor estadístico. No es un tratamiento legítimo, lo dice la ley, cuando no está justificado de manera proporcional con la finalidad que persigue", dice.
Imagen referencial de personal del INEC en julio de 2022. INEC/Facebook
Riesgo doble
El experto en ciberseguridad afirma que la exposición de un dato como el número de la cédula entraña un riesgo doble.
Esto porque en Ecuador hay un récord muy pobre en materia de seguridad de la información y protección de datos.
Por ejemplo, el 22 de julio de 2021, la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT) fue víctima de un ciberataque, es decir, un ataque externo a los sistemas. La empresa fue declarada en emergencia.
Se trató de un ataque externo de ransomware EXX contra el informático de CNT, que alteró las áreas de facturación, activaciones, recargas y expuso algunos datos de los clientes.
Beltrán, quien además es máster en derecho de seguridad nacional, se refiere a este incidente y advierte que ninguna agencia o dependencia estatal o privada del mundo es absolutamente impenetrable.
Cuando el volumen de información es demasiado profundo y se expone en una plataforma tecnológica, los riesgos de seguridad crecen.
Los procesos de validación de bancos o tarjetas de crédito están apalancados en preguntas de naturaleza biométrica, como segundo apellido materno, últimos dígitos de la cédula e información sobre la fecha de nacimiento y el estado civil.
Al exponer el número de la cédula, asegura Beltrán, se incrementan las probabilidades de fraudes electrónicos, estafas y de casos de delitos contra la integridad personal.
Por eso, recomienda buscar otros mecanismos para acceder al censo en línea.
Hay una justificación
Al respecto, el director del INEC, Roberto Castillo, argumenta que ha habido desinformación.
"Las preocupaciones de la ciudadanía no están en la cédula, sino en que no les quiten el bono de desarrollo humano", dice.
Y admite que hay personas extranjeras que se hallan en una situación migratoria irregular y temen que, al informar sobre su lugar de domicilio, el INEC avisará a Cancillería para su deportación.
Ninguna de estas cosas va a pasar, ratifica Castillo.
La Ley de Protección de Datos Personales y la Ley Estadística le dan la facultad al INEC para solicitar y tratar información que entraña datos de carácter personal.
Pero "la ley también le otorga responsabilidades sobre las medidas de protección y seguridad de estos datos", agrega Castillo.
E insiste en que si la persona decide no poner su cédula, puede continuar llenado el formulario tanto para el censo en línea como para el presencial, que se iniciará el 7 de noviembre.
Roberto Castillo, director ejecutivo del INEC, expone sobre el censo. Facebook
Estas son las tres razones por las que el INEC pide el número de cédula:
- Eliminar casos duplicados, dado que este censo se va a realizar durante varios días.
- Revisar y corregir la información declarada por el propio usuario. Por ejemplo, si el informante comete una imprecisión al declarar su edad o fecha de nacimiento.
- Integrar otras fuentes de información. Gracias a la cédula, por ejemplo, se puede buscar en los registros administrativos del Conadis si la persona tiene discapacidad.
Cuando se termine el censo de población, el INEC hará un proceso de "buen tratamiento de los datos, se encriptan, se despersonalizan y se vuelven anónimos", dice Castillo.
Añade que al liberar la base de datos, se eliminan las variables de los nombres, de la cédula, de la dirección domiciliaria.
Sin embargo, Diego Beltrán, especializado en ciberseguridad, recomienda al INEC brindar una alternativa a quienes no quieran dar su número de cédula: descargar el formulario, llenarlo a mano o en computadora y, posteriormente, entregarlo a los censistas cuando sea el censo presencial. Pero esta no ha sido aceptada.
Nota de la redacción. Esta nota fue publicada el 19 de octubre de 2022, en la edición se omitió el nombre del especialista en seguridad que recomienda el INEC buscar alternativas para el censo. Ese error fue corregido el 14 de octubre. Ofrecemos disculpas.
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