En su denuncia en la Fiscalía, el Ministerio de Educación reconoce la existencia de una red de pornografía que comparte y vende material de niñas y adolescentes de Guayaquil.
Las alertas están encendidas: un grupo de 39 adolescentes de colegios privados de Guayaquil compartían y hasta vendían material sexual de menores de edad a través de dispositivos móviles, lo que configura un presunto delito de pornografía infantil.
El hecho se conoció por la denuncia del abogado Fernando Rosero, quien además representa a una joven presuntamente abusada por tres compañeros del colegio SEK, durante un paseo escolar en República Dominicana.
Tras la denuncia, contó Rosero este 13 de marzo al medio digital La Contra, personal de la Fiscalía, el Ministerio de Educación y la Dinapen acudieron a su oficina en el centro de Guayaquil.
"Les entregué todo el material, y la información de quién me envió los chats, para que desarticulen a estos criminales que se jactan y vanaglorian haciendo esto", dijo Rosero, quien critica la respuesta tardía del Ministerio de Educación.
Esta Cartera de Estado informó que ingresó una denuncia formal por el presunto delito de pornografía de niñas y adolescentes en la Fiscalía de Guayas.
Según la autoridad educativa, con esta denuncia se "busca precautelar la integridad y los derechos de la comunidad educativa, efectuando el debido seguimiento y acompañamiento legal".
Aunque para Rosero, el daño ya está hecho, puesto que afirma, con base a los testimonios de quienes hablaron con él, que la presunta red de pornografía funciona desde 2021 en Guayaquil, y abarca a estudiantes de colegios privados, que se unían a este chat grupal.
"En ese mismo chat, se daban consejos de cómo abusar de las chicas, se decían 'tómale un video'. Luego, se repartían los videos", agregó Rosero, este miércoles.
En efecto, un padre de familia contó a PRIMICIAS que fue testigo en 2022 de cómo varios jóvenes estudiantes revisaban varios videos o 'PAC' en un televisor durante una fiesta. Este material incluía también fotos con contenido sexual de otras alumnas de colegios privados de la ciudad.
La denuncia de Rosero y los casos que sigue en Guayaquil llega en momentos en que el Ministerio investiga otro presunto hecho de violencia sexual en Quito, usando medios digitales.
Este último caso ocurre en el colegio privado La Salle de la capital.
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