Un ciudadano de nacionalidad china, quien se encuentra desaparecido, tenía en su vivienda tortugas Galápagos vivas y caballitos de mar disecados, informó la Policía.
La Unidad de Protección de Medio Ambiente de la Policía confirmó el decomiso de 16 tortugas Galápagos, y 55 caballitos de mar en una vivienda en el sur de Guayaquil.
El operativo se realizó la tarde del 26 de febrero, y los agentes policiales buscaban armas, pero en su lugar hallaron estas especies silvestres.
"Son personas, por lo general extranjeras, que se dedican a acumular especímenes silvestres. En el caso de las tortugas gigantes de Galápagos son muy apetecidas en el extranjero", dijo el agente de la unidad ambiental de la Policía, Fran Huilca, en declaraciones a Teleamazonas.
Según Huilca, la vivienda pertenece a un ciudadano de nacionalidad china, y sobre quien se desconoce su paradero.
Cada tortuga de Galápagos, señaló el agente, podría costar USD 2.000 en el extranjero.
Mientras que los caballitos de mar se capturan, luego se disecan para ser transportados y vendidos como ingredientes de platos exóticos en Asia.
El comercio ilegal de especies silvestres se considera el cuarto negocio más lucrativo en el mundo, luego del narcotráfico, la venta ilegal de armas y la trata de personas, según el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF). Genera anualmente USD 23.000 millones al año para los traficantes.
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